Orriols ignora a la extrema derecha
Los ultra repartieron comida solo para españoles hace poco en el barrio obrero de Valencia Las opciones xenófobas cosechan un puñado de votos mientras crece el apoyo a la izquierda
Cuenta un miembro de la mesa electoral de Orriols, un barrio obrero del norte de Valencia, que un señor mayor entró el 25-M en el colegio, buscó entre las papeletas y al cabo de un rato preguntó: “¿No está España 2000? Pues no voto”. Y se fue.
Se trató de una de las escasas referencias al partido que dejó la jornada electoral en Orriols, el enclave urbano donde hace unas semanas la formación ultraderechista efectuó un reparto de comida “solo para españoles”. A pesar de que el barrio parece contar con los elementos para que el llamamiento xenófobo prenda, con una tasa de paro del 40%, una presencia de inmigrantes del 30% y un ambiente de desánimo en las calles tras seis años de crisis, sus habitantes ignoraron a la extrema derecha.
En los colegios electorales no había papeletas de España 2000 porque no se presentaba a las europeas. Pero sí lo hacían otras formaciones de la misma orientación ideológica. Con muy poco éxito en el barrio. Falange, 44 votos. La España en Marcha, 43. Democracia Nacional, 29.
Resultados en Orriols
PP: 22,8% (48,2% en 2009)
PSPV-PSOE: 21,2% (40,9% en 2009)
EUPV: 12,7% (3,6% en 2009).
UPyD: 10,8% (2,8% en 2009).
PODEMOS: 9,2%
PRIMAVERA EUROPEA: 7,4%.
CIUTADANS:3,1%.
PARTIDO ANIMALISTA: 2%.
Orriols se pareció al resto del Estado en el hundimiento del bipartidismo. Pero los votos que históricamente recibían los dos grandes no acabaron en opciones de ultraderecha. Se repartieron, sobre todo, en una constelación de partidos de izquierda. Fue uno de los distritos (Orriols forma parte del de Rascanya) de Valencia donde el PP obtuvo un peor resultado.
Los populares, que gobiernan la ciudad desde 1991 con la alcaldesa Rita Barberá, cayeron del 48,2% de votos en las europeas de 2009 al 22,8%. Los socialistas, que han cosechado un bajísimo resultado en la ciudad, quedaron aquí cerca de sus rivales, con un 21,2%. Esquerra Unida logró un 12,7%. UPyD, un 10,8%. Podemos, un 9,2%. Y Primavera Europea (Compromís), un 7,4%.
A Guillermina Ramal, ama de casa de 56 años, que cobra menos de mil euros de pensión de viudedad, los resultados no le sorprendieron. “El PP y el PSOE han hecho muy mal las cosas. La gente pobre, la gente trabajadora, está quemada. Hay muchísimo paro. Dan bandazos y no resuelven nada. Y las tonterías que resuelven a nosotros no nos interesan”, contaba Ramal después de recoger a su nieto del colegio. “Lo que nos interesa son puestos de trabajo, tener una seguridad”, añadía.
"PP y PSOE lo han hecho muy mal. Lo que resuelven no nos interesa", dice una vecina
Ramal, que dice haber hecho “milagros” para ayudar con su pensión a una hija en paro y a sus nietos, se quejaba de la corrupción, de los recortes, del copago farmacéutico y de lo sucias que, aseguran, están las calles de un tiempo a esta parte en Orriols. Y explicaba: “Yo he votado a este nuevo, al Tú Puedes, o Podemos. Me gusta porque llama al pan, pan y al vino, vino. Ahora vamos a ver cómo resulta. Todos prometen mucho cuando están abajo”.
A dos calles de allí, Mari Carmen Cortés (que tiene trabajo), Mara López (parada) y Arturo Peiró (parado) comentaban los resultados electorales. Tampoco a ellos les extrañaba el pobre resultado de la alternativa ultra. "Lo que están haciendo los centros de inmigrantes en Orriols es ayudar a todo el mundo", decía Cortés. "Aquí en el barrio hay cuatro fachas mal contados", terciaba Peiró, que después de cotizar durante tres décadas lleva tres años desempleado: "Lo que nos preocupa aquí es el paro, que hay una burrada. Y no tenemos ni dinero para irnos a Alemania".
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