Un juzgado de Málaga impide la visita de Servini al mausoleo de San Rafael

La magistrada argentina María Servini, instructora en Buenos Aires de la única causa que existe contra los crímenes del franquismo, no conocerá el mausoleo erigido en Málaga para honrar a las víctimas de la mayor fosa común de España, ejemplo de colaboración entre todas las fuerzas políticas. El Juzgado de Instrucción número 9 al final no ha autorizado la visita de Servini al antiguo cementerio de San Rafael, que desde principios de año alberga un monumento en memoria de las 4.410 personas fusiladas durante la Guerra Civil y la represión franquista en las tapias del camposanto.

Según el abogado de los querellantes, Máximo Castex, la negativa del juzgado ha llegado la misma mañana del lunes, tras la insistencia de los secretarios judiciales que acompañan a Servini, que pretendía hacer una inspección ocular acompañada por historiadores, además del fiscal del caso. El juzgado se ha prestado a realizar él mismo la diligencia el próximo 18 de junio. La juez Servini tiene previsto viajar hoy a Madrid para continuar con nuevas declaraciones de víctimas y previsiblemente abandonará España a finales de semana.

Castex ha explicado que la magistrada solo había tenido problemas para lograr la autorización judicial pertinente en Miranda de Ebro (Burgos), donde se pretendía escuchar el testimonio de una persona de 97 años. Ahora se une el caso de Málaga, que el abogado achacó a “la falta de voluntad” del juzgado. La juez ha actuado sin problemas y con la correspondiente resolución en Guernica, Sevilla, Carmona y Marchena.

Los restos de los fusilados en el antiguo cementerio de San Rafael de Málaga descansan en un panteón desde el pasado enero. Una pirámide revestida de mármol blanco acoge los restos de 2.880 personas. Sus nombres y apellidos están esculpidos junto al de las otras víctimas sobre las que existe constancia documental que fueron ejecutadas en las tapias del antiguo cementerio malagueño. En total, 4.410 víctimas del franquismo que ya descansan en paz gracias a la colaboración y al acuerdo, en este caso, de todas las administraciones públicas y partidos políticos.