Mas cree que el soberanismo es un camino personalmente peligroso”

El presidente catalán, Artur Mas, no piensa echar el freno en el proceso soberanista aunque el Estado ya haya dejado claro que no permitirá la consulta. Mas prometió este martes “ponerle las cosas dífíciles al Estado” para que no pueda impugnar la ley de consultas, advertencia que hoy ha concretado asegurando que no pondrá “excusas legales” al Gobierno de Mariano Rajoy. Un camino en el que Mas insistirá aunque sea consciente que puede tener consecuencias para su trayectoria, como ha admitido: “Estamos en un camino personalmente peligroso”, le ha espetado a Alícia Sánchez-Camacho, líder del PP, en la sesión de control al Gobierno catalán.

El peligro que ve Mas para su trayectoria no lo ve en la sociedad catalana. Una población que ve unida y cívica tras una jornada de Sant Jordi por la que el líder catalán se ha felicitado. El presidente aprovechó el día para reunirse con corresponsales extranjeros, a los que quiso mostrar que no hay fractura social en Cataluña. También utilizó a sus interlocutores para pedir a la UE que ayude a buscar “una solución” para el proceso soberanista. Pese a los múltiples pronunciamientos de las autoridades europeas contra la secesión, Mas considera que la UE todavía no ha dado una posición oficial. Así se lo ha dicho a Albert Rivera, de Ciutadans, que le recordaba las palabras de José Manuel Durao Barroso, presidente de la Comisión Europea, rechazando la secesión. “No me pronunciaré sobre esto hasta que no haya una petición formal de un Estado a las instituciones europeas por registro y no haya una respuesta oficial de las instituciones europeas en su conjunto. Cuando tengamos esta respuesta oficial nos podremos pronunciar”, ha dicho Mas, que ha retado al Gobierno español a pedir el posicionamiento oficial.

El presidente catalán ha demostrado en la sesión de control que ha abandonado toda búsqueda del encaje en España. Una de las vías para buscar el entendimiento ha sido históricamente el modelo de financiación, solución que hasta 2012, con el pacto fiscal, Mas veía con buenos ojos. Ahora el presidente catalán ha abandonado toda esperanza, y en respuesta al líder socialista, Pere Navarro, ha aseverado que Cataluña no liderará una reforma de financiación autonómica. “Lo hemos liderado siempre, y si lo lideramos nosotros se montará otra campaña anticatalana. Así es el Estado. Si la reforma de la financiación es una urgencia para todos los ciudadanos del Estado, quién tiene responsabilidades en España y quiera ejercer su liderazgo que lo haga. Nosotros lo hemos hecho muchas veces y hemos salido dañados” , ha apostillado Mas.