Orozco reconoce que ofrecerle trabajo a un policía “no estuvo bien”

El alcalde de Lugo ha anunciado su intención de querellarse contra el empresario asturiano José Luis Álvarez, quien "dijo que le habían dicho que (el regidor) cobraba sobornos", y contra el expolicía local que le grabó una conversación en la que le pedía empleo, aunque el regidor también ha reconocido que "no" estuvo "afortunado" en dicho diálogo con el exagente. Orozco ha aludido así a la conversación que un hombre que había ocupado una de las plazas de policías interinos en Lugo mantuvo con él en su despacho para pedirle un nuevo trabajo y quien le grabó cuando el regidor le respondió a su petición ofreciéndole un empleo "por seis meses" o un puesto en una futura empresa de gestión del agua que pretendía constituir.

En la grabación, que ha sido incorporada al sumario de la Operación Pokémon, se escucha al alcalde de Lugo explicándole al expolicía que le pide un trabajo que el Ayuntamiento no puede sacar "ninguna plaza, no puede contratar a nadie". El regidor hace gestiones para averiguar si una de las cinco plazas de policías de movilidad que tienen está en la oferta pública de empleo, pero no es así. "Yo te puedo ofrecer trabajo por seis meses", asevera Orozco, quien está imputado en la Operación Pokémon, en la que se ha visto salpicado por acusaciones de que podría haber recibido sobornos de empresas con concesiones municipales, unas imputaciones que él siempre ha negado de forma reiterada. En todo caso, el regidor lucense ha matizado que "donde no hay equívocos ni duda" es "en los hechos" y ha agregado que dicha persona "no fue contratada por el Ayuntamiento, ni por ninguna empresa que trabaja para el Consistorio".

"A mí nadie me va a convencer nunca para que cometa una ilegalidad y prueba de ello es que a esta persona la acabé echando de mi despacho en una conversación en la que traté que estuviera presente el asesor jurídico del Ayuntamiento", ha reivindicado, en alusión a un segundo encuentro que mantuvo con el expolicía y que se produjo posteriormente a la grabación incorporada al sumario.

Orozco ha anunciado que sus abogados "están estudiando acciones legales contra esta persona y ya tienen todo cerrado para presentar la próxima semana la petición de permiso para querellarse también contra el empresario asturiano José Luís Álvarez Álvarez --uno de los socios de Cechalva, concesionaria de la grúa en Lugo--, a quien se ha referido como "la única persona en este procedimiento que dice que le dijeron que cobraba sobornos". "Y eso también es mentira, ya lo acreditaron todos los que pasaron por el juzgado, mis cuentas que las aporté voluntariamente al juzgado y también lo hará la Interpol si es preciso y se le puede preguntar a Google y a cuanta agencia de viajes se les ocurra", ha remarcado-

Al tiempo, ha defendido que "no hizo ninguna gestión" a favor de esa persona que le grababa en el despacho, y que fue acompañada de su padre, que también fue Policía Local. "Si ustedes escucharon las conversación verán que lo que le insistía era en la necesidad de que estudiara y se preparara", ha indicado, para añadir que le transmitió este mensaje "a lo largo de la conversación en distintas ocasiones". Sobre ese "compromiso" que se desprende de lo grabado, ha explicado que se refería al padre que "fue policía" del Ayuntamiento desde antes de entrar él. "Y las noticias que yo tengo por sus superiores es que era un hombre cumplidor, que era un hombre trabajador y que era un hombre que siempre estuvo a trabajar por el bien común", ha apostillado.

En su intervención ante los medios, ha insistido en todo momento en que "no" estuvo afortunado y parafraseando a Ortega y Gasset ha señalado que "las palabras son sacramentos de difícil distribución". "Las cosas a veces no son lo que parecen. La precisión de un lenguaje en una conversación donde te van sacando temas, igual te lleva a no ser lo preciso que tienes que ser. En ese sentido no estuve afortunado y puede llevar a confusión", se ha disculpado.