Las Cortes llaman a dos cargos del Banco de España pese al gobernador

La comisión de investigación sobre el hundimiento de Caja Mediterráneo (CAM) acordó este miércoles reiterar por unanimidad las convocatorias a los inspectores del Banco de España Pedro González y Ángel Rico para que comparezcan en las Cortes Valencianas, pese a que el gobernador del organismo supervisor, Luis M. Linde, pidió que las reconsiderase al detectar que en anteriores comparecencias se había constatado “la inadecuación del formato oral a la comparecencia de autoridades estatales ante comisiones autonómicas de investigación, a la luz de los límites puestos de manifiesto por el Consejo de Estado”.

Linde sugería canalizar las preguntas a los inspectores por procedimiento escrito, pero la comisión decidió insistir en que comparezcan personalmente el director de un departamento de inspección y un jefe de grupo de inspectores a quienes se ha citado. La actitud de los diferentes grupos, sin embargo, tuvo grados de intensidad. La diputada de Esquerra Unida Esther López consideró “un insulto” la carta del gobernador del Banco de España y pidió defender la dignidad de la comisión. Mireia Mollà, de Compromís, calificó como “una falta de respeto” la postura de Linde.

El socialista Ángel Luna, sin embargo, recordó que la polémica sobre la comparecencia de los cargos del Banco de España, cuya fiscalización recae en el Congreso de los Diputados, acompaña a la comisión de la CAM desde el principio, y se ha producido en otros parlamentos autonómicos, y propuso reiterar la petición. En el mismo sentido se pronunció Vicente Betoret, del PP, que planteó volver a llamar a los dos inspectores “aclarando que no se pretende fiscalizar al Banco de España ni a esas personas”.

Aunque Mollà y López se mostraron partidarias de "contestar" los juicios de valor del gobernador del Banco de España sobre la forma en que se trató a otros comparecientes, entre ellos su predecesor, el exgobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez, Luna señaló que reiterar la petición de comparecencia ya implica no aceptar lo que calificó de “matiz leve” en la carta de Linde. Según el diputado socialista, lo importante es que las dos comparecencias se produzcan y no darse por satisfechos “dando un buen bofetón al gobernador”. Betoret abogó por enviar un escrito similar al de otras ocasiones.

Al final, en aras de la unanimidad, las diputadas de Compromís y Esquerra Unida aceptaron no incluir ninguna réplica a las opiniones del gobernador del Banco de España y se acordó volver a enviar las peticiones de comparecencia.