CiU y ERC, solos en la defensa del Pacto de Salud tras el desplante del sector
El resto de partidos, sindicatos y entidades rechazan el plan de Boi Ruiz
Convergència i Unió (CiU) y Esquerra Republicana (ERC) se han quedado solos en la defensa del Pacto Nacional de Salud, que presentarán en solitario en el Parlament, tras el desplante del resto de partidos y sindicatos y entidades del sector. El presidente de la comisión que ha elaborado el documento de bases del Pacto, Pere Ibern, anunció el viernes la finalización de los trabajos del proyecto, una iniciativa del Departamento de Salud que pretendía “sentar las bases del futuro sistema sanitario”.
Pero tras ocho meses de negociaciones, la mayoría de los actores se han ido levantando de la mesa. Así lo han hecho los sindicatos CC OO, UGT, el de enfermería Satse y Metges de Catalunya; los partidos ICV y CUP —el PSC ha dicho que no suscribe el documento pero que no tira “la toalla para poder llegar a acuerdos”; y la patronal privada ACES. Aunque con distintos argumentos, todos los actores coinciden en criticar que el documento final no asegura la sostenibilidad del sistema ni su financiación suficiente y que tampoco resuelve problemas como las listas de espera.
Tras constatar su soledad, las diputadas en el Parlament Begonya Montalbán (CiU) y Alba Vergés (ERC) lamentaron ayer el desmarque de sindicatos y partidos. En un comunicado, Montalbán remarcó que han trabajado en un acuerdo de mínimos y con “visión de futuro”, y deploró “si por parte de algunos de los agentes y grupos parlamentarios no se ha entendido así”, aunque remarcó que no debe haber ningún punto de desacuerdo insalvable y que buscarán el máximo consenso en el Parlament.
En otro comunicado, Vergés lamentó que “se han mezclado aspectos como la coyuntura actual del país y del sector”, lo que a su juicio ha motivado la desvinculación de agentes importantes. La diputada republicana llamó a las fuerzas parlamentarias a ponerse de acuerdo para tener el mejor sistema sanitario público.
La Generalitat aprobó en mayo la creación de un grupo de trabajo para definir cómo debía ser el sistema de salud catalán actual y futuro. El texto, que cuenta con 83 puntos, reitera el acceso universal de los ciudadanos al sistema sanitario y su equidad, promueve la participación de los pacientes y profesionales, impulsa la coordinación con los servicios sociales y pretende reforzar la atención primaria y comunitaria. El pacto también prevé medidas como la instauración de “precios públicos” más reducidos para aquellos tratamientos —como algunos de dentistas u oftalmólogos— no incluidos en la cartera de servicios que ofrece la sanidad pública.
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