Las alusiones carcelarias escuecen
Bronca en las Cortes Valencianas por los ataques del socialista Moreno a la corrupción Una queja del portavoz del PP hace que Cotino pierda los papeles
A falta de proyectos del Consell, en las Cortes Valencianas propone leyes la oposición. Este miércoles fue Compromís quien abrió el pleno con una proposición para recuperar la deuda histórica de al menos 13.400 millones acumulada por el déficit de financiación. “Otras comunidades del PP, sin tener razón, están pidiendo la deuda histórica”, alegó el portavoz de la coalición, Enric Morera, para defender que se convierta esa supuesta deuda del Estado con la Comunidad Valenciana en una quita de la que pesa actualmente sobre la Generalitat, que supera los 30.000 millones. El tono del PP, el partido del Gobierno, fue inusitadamente duro. El diputado Rubén Ibáñez acusó a Compromís de pretender fabricar “un psicotrópico parlamentario”, le inquirió sobre “¿cuál es el precio del silencio?” que, según él, mantuvo la coalición durante el Gobierno socialista en España sobre la financiación y criticó a Morera por pretender hacer “una mascletà de la financiación”.
"No piensan, ni creen, ni sienten como un valenciano", llegó a afirmar Ibáñez sobre los diputados de la oposición, para proclamar: “Nosotros primero somos valencianos y después del PP”. Eso dio pie a que tanto Morera, como Ignacio Blanco, de Esquerra Unida, o Julián López, del PSPV-PSOE, acusaran a los populares de “genuflexión” ante Madrid. López aseguró que el PP es “muy agresivo y beligerante” en las Cortes Valencianas y “sumiso y silencioso” en el Congreso o el Senado.
La mascletà, sin embargo, vino después, cuando la oposición arreció en sus críticas al PP y logró sacar al partido mayoritario de sus casillas. Una intensa bronca marcó el final de la intervención del diputado socialista Josep Moreno, que defendía una proposición no de ley para garantizar el mantenimiento del patrimonio de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV) tras su cierre. Moreno aludió a la situación de algunos diputados del PP, y citó a Pedro García, que fue director general de la cadena y ahora se ha sabido que era socio de la trama Gürtel, así como a Milagrosa Martínez, todavía sentada en los escaños del PP pese a estar a punto de ser juzgada, y al escaño vacío del exconsejero Rafael Blasco, que asistía en esos momentos a su propio juicio.
Rechazada una ley para recuperar la deuda histórica que propuso Compromís
El parlamentario socialista había revelado que Canal 9 tiene una unidad móvil prácticamente nueva que costó cerca de dos millones de euros y los liquidadores de RTVV tasan en 200.000 euros; que el servicio de multicontinuidad del centro de producción de Burjassot costó casi 600.000 euros y pretenden desguazarlo y que la red de repetidores se construyó sobre terrenos cedidos por diversos municipios. Durante su intervención anunció que el Tribunal Constitucional ha admitido a trámite el recurso del PSOE contra el cierre de la cadena autonómica y advirtió a los diputados de la derecha de que no permitan vender el patrimonio de RTVV si no quieren acabar como los cargos hoy imputados o procesados.
Enric Morera, que apoyó la iniciativa, aseguró: “RTVV volverá”. Y se preguntó “¿de qué señas de identidad presume el PP si son los que han decidido cerrar RTVV?”. Ignacio Blanco, de Esquerra Unida, sugirió a su vez, que el Consell cerró RTVV “para destruir las pruebas del caso Gürtel”. La popular Sagrario Sánchez, que dedicó casi toda su intervención a explicar que el Tribunal de Cuentas audita los ejercicios de RTVE en 2010 y 2011, se limitó a asegurar que el patrimonio de RTVV “está a salvo, custodiado y en perfectas condiciones”.
Condicionado probablemente por la situación interna de su grupo, pendiente de la dimisión o expulsión de Milagrosa Martínez y con otros diputados en apuros judiciales, el portavoz popular, Jorge Bellver, pidió la palabra y el presidente de las Cortes, Juan Cotino, se la concedió sin preguntar para qué, entre protestas de los grupos de izquierda. Previamente, el diputado socialista Rafael Rubio había protestado y Cotino le había amonestado dos veces en breves segundos. "Me alegro de haberle despertado", comentó con sorna el socialista. Bellver solicitó que se retirasen las alusiones a su grupo en las que Moreno había hecho referencia a que, cuando deje el cargo, volverá a su casa en Riola mientras el mundo de los parlamentarios del PP “se abre con una verja eléctrica y tiene un guardia en la puerta”.
La oposición reclama que se protejan los bienes de RTVV
Moreno, que había citado a diputados imputados o implicados en casos de corrupción como Rambla, Costa, Alperi, Castedo, Camps, Barberá, Martínez o Mayte Parra, respondió: “Si no están imputados, les pido disculpas; si lo están, les pido que convoquen elecciones de una vez”.
En medio de protestas de la oposición de "tongo, tongo", Cotino, que por momentos se vio desbordado, dio tres minutos a Bellver y solo uno a Moreno. La diputada Mayte Parra, a la que Moreno había citado, pidió la palabra para desmentir que esté imputada y pidió que retirara lo que había dicho. A lo que el diputado socialista intentó responder pero Cotino le negó la palabra para exigirle que respondiera "sí o no". Todavía dio el presidente de la Cámara una última posibilidad de intervenir a Bellver, que pretendía que se retirasen del acta las "alusiones penitenciarias y carcelarias" a su grupo aunque el diputado que las profirió no aceptase hacerlo. Sagrario Sánchez culminó la escena al afirmar: “Solo por hoy, menos mal que no están las cámaras de RTVV”.
Tras la votación, el presidente de las Cortes ordenó desalojar de la tribuna de invitados a alguien que mostró uno de los chalecos reivindicativos de los trabajadores de Canal 9.
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