18 heridos al despeñarse un autobús escolar en Valencia

Un autobús escolar que transportaba a 21 estudiantes de secundaria al instituto La Hoya de Buñol se precipitó a las siete de la mañana de este martes por un terraplén de unos 15 metros de desnivel en el término de Dos Aguas (Valencia). Diecisieis de los alumnos resultaron heridos, dos de ellos graves, con traumatismo cráneoencefálico, uno y fractura de cadera, otro. También resultaron lesionados el conductor y una monitora escolar. A última hora de la tarde, permanecían hospitalizados algunos menores heridos leves y uno grave. El vehículo salió de una curva y entró en un tramo recto a mitad del cual invadió el carril contrario.

La mayoría de los viajeros llevaban puesto el cinturón de seguridad, según informó la Dirección General de Tráfico (DGT). Esto, unido a que el vehículo contaba con una estructura y unos arcos de seguridad que aguantaron su caída, evitó mayores consecuencias. La Generalitat Valenciana precisó que el autobús era del año 2008 y había pasado la ITV el pasado 12 de febrero.

La prueba de alcoholemia practicada al conductor, que recorría esta ruta montañosa asiduamente, resultó negativa, según informaron a Efe fuentes de la Guardia Civil y la DGT.

El accidente se produjo en el kilómetro 63,5 de la CV-580, en sentido Buñol. El autobús escolar se dirigía al instituto de Educación Secundaria La Hoya de Buñol, el único de esta población y en él viajaban 17 alumnos procedentes de Millares y Dos Aguas, que estudian ESO y bachillerato en el Instituto de Secundaria de Buñol.

Hasta el lugar del accidente se desplazaron numerosas ambulancias, así como bomberos de Chiva y Torrent, Policía Local y Guardia Civil. Los heridos fueron trasladados a los hospitales La Fe, General y Clínico de Valencia,y al hospital de Manises, según detalló la Consejería de Sanidad.

Desde la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes de Tráfico DIA, su presidente, Francisco Canes, subrayó la importancia de “renovar el parque de autobuses, especialmente los escolares”, como ha puesto de manifiesto este accidente. “No queremos ni pensar en las graves consecuencias que podría haber acarreado el hecho de que no llevasen puesto el cinturón”, añadió Canes, quien reivindicó que todos los autobuses lleven cinturón, “independientemente de su fecha de matriculación”.