El supuesto homicida de Fuenlabrada murió de un infarto de miocardio

La autopsia al cuerpo de Juan R., de 45 años y supuesto autor de la muerte de su excompañera sentimental Nuria T. S. ocurrida ayer en el barrio fuenlabreño de Loranca, ha revelado que murió de un ataque al corazón, según han informado fuentes policiales. El forense y los especialistas del Grupo VI de Homicidios ya apuntaron ayer a esta posibilidad, dado que encontraron al fallecido con guantes y con protectores de plástico en el calzado para no dejar huellas mientras preparaba su huida.

El crimen se descubrió alrededor de las cuatro y media de la tarde cuando un sobrino de la víctima, de 17 años, intentó abrir la puerta de la calle, pero no pudo dado que las llaves estaban puestas por dentro. Los bomberos tuvieron que abrir la puerta y se encontraron con los dos cadáveres. El de la mujer, que presentaba fuertes golpes en la cara, se hallaba tirado en el suelo de una de las habitaciones. El de Juan R. estaba en el pasillo, justo a la entrada del cuarto de baño. En la primera evaluación del cuerpo no se hallaron signos externos de violencia. Tan solo tenía alguna contusión y restos de sangre en una mano. La autopsia, realizada esta mañana, ha confirmado que fue un paro cardiaco.

Los vecinos se quedaron sorprendidos por ambas muertes, ya que no habían oído ninguna discusión entre la pareja. De hecho, muchos no sabían que habían roto desde hacía un mes y que él ya no convivía en el domicilio de la calle de Miguel de Cervantes número 20. Una vecina comentó incluso que la habían recomendado que no abriera la puerta a su excompañero, ante el temor de que la hiciera algo. La mujer no había denunciado ni amenazas ni malos tratos. No se encontraba en el programa de protección de víctimas de violencia de género.

El Ayuntamiento de Fuenlabrada ha decretado dos días de luto por la muerte de Nuria T. S., según informaron fuentes municipales. Esta tarde ha habido una concentración a las 17.30 en la plaza de las Artes, a las puertas de la Junta de Distrito de Loranca, dónde se ha leído un comunicado de condena al suceso y de apoyo a los familiares de la víctima.

El alcalde, Manuel Robles (PSOE), ha mostrado su "más enérgica repulsa" y condena a este asesinato, que según todos los indicios apuntan a que se trata de un nuevo caso de violencia de género.