Feijóo: “Zapatero rompió el consenso sobre el aborto por 16 votos”

La sesión de control al Gobierno constituyó ayer un nuevo suplicio para el presidente. Antes de que AGE le interpelase por su principal preocupación, la corrupción campante en ciertas instituciones gallegas; Bloque y PSdeG le mentaron otro de los asuntos que más le incomoda: la polémica reforma de la ley del aborto que prepara el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón. Socialistas y nacionalistas se lanzaron a la yugular del presidente. Acusaron a Feijóo de escudarse en una “falsa imagen de dirigente centrista” y de no hacer nada contra el anteproyecto de ley.

Primero el portavoz socialista, José Luis Méndez Romeu, y después el del BNG, Francisco Jorquera, lo señalaron al presidente como cómplice de “la derecha más reaccionaria” que “obedece a los púlpitos”. Méndez Romeu le recordó a Feijóo que su partido ni siquiera votó a favor de la ley de plazos de 1985, a la que ahora pide volver el presidente gallego. El jefe del Ejecutivo definió el debate como “un cruce de caminos éticos, morales y jurídicos” y también “el avance” que supone no criminalizar a las mujeres en el texto de Gallardón, entre una fenomenal bronca de los escaños de la oposición donde (sobre todo pero no solo) las diputadas le exigían libertad para decidir sobre su cuerpo.

Feijóo, que durante toda la pasada legislatura sacó adelante leyes de todo tipo con su exigua mayoría de un solo diputado y que ahora con una diferencia de cuatro frente a la oposición amenaza con reformar la ley electoral, lamentó que Zapatero rompiese el consenso existente desde 1985 a propósito del aborto con “16 votos de diferencia”. Recordó además que el PP llevaba en su programa una ley de protección de las mujeres embarazadas. Pero volvió a marcar distancias con el anteproyecto del ministro al que llamó varias veces “texto inicial”. Jorquera y Romeu exigieron a los populares que reclamasen también la retirada del texto. Feijóo defendió la información que los centros de atención a la juventud ofrecen sobre salud sexual e invitó a la oposición a sumarse a un “consenso inteligente” en lugar de “buscar la confrontación” sobre el aborto. “Si quieren diálogo para conformar una propuesta que dure como en 1985, podemos hablar”, aseguró el presidente.