Un hombre de diálogo sin estridencias

El nuevo presidente de los empresarios andaluces es una persona moderada en su comportamiento, sus formas y sus declaraciones. Javier González de Lara (Málaga, 1963) huye de estridencias y polémicas inútiles y quienes lo tratan destacan de él su cordialidad y su espíritu de diálogo. No esquiva un debate y defiende su postura con convicción, pero sin sectarismos. Prácticamente no dice una palabra más alta que otra.

“Soy consciente de los riesgos y de la tarea ingente que hay por delante”, replicó hace unos días a una persona que le dijo, bromeando, que no sabía si felicitarle o darle el pésame por su nuevo cargo al frente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA).

Licenciado en Derecho, González de Lara lleva media vida ligado a la patronal de Málaga, en la que asumió cargos de responsabilidad muy pronto, primero con José María Flores y después con Vicente García. Sustituyó a este en la presidencia de la CEM en mayo de 2011, tras ser refrendado por aclamación en asamblea, sin opositores, un gesto que sus defensores utilizan para resaltar su imagen de consenso. Hasta ese momento era vicepresidente ejecutivo y secretario general de la formación.

Los objetivos que se planteaba entonces eran potenciar la interlocución social e institucional, impulsar fórmulas de colaboración público-privada e intensificar las medidas de apoyo a las pequeñas y medianas empresas. González de Lara pertenece al mundo de las pymes. Es socio de Málaga-Visión, dedicada a la promoción de servicios turísticos, y para él, la solución a la crisis está en la creación de empresas.

Casado y con dos hijos, su apego por la pintura es más que una afición y en Málaga es conocido por sus acuarelas de marinas, en las que plasma su ánimo perfeccionista. Ha participado en varias exposiciones y vende cuadros a buen precio. En 2006 recibió la Medalla de Oro del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales por su contribución al diálogo social en la provincia.

“Si la patronal le deja hacer, puede ser un buen interlocutor en el futuro de la concertación social en Andalucía”, apunta Antonio Herrera, secretario provincial de CCOO. “Amigo personal” de González de Lara, resalta su “talante para el diálogo”, algo que lo ha acercado al nuevo presidente de la CEA en sus distintas etapas en la patronal malagueña. Ese ánimo de consenso compartido llevó a ambos a desbloquear el convenio de oficinas y despachos tras más de una década enquistado, rememora Herrera.

También recibe buenas palabras González de Lara del exsecretario de CCOO en Málaga, Francisco Gutiérrez, con el que tiene una buena relación. “Es una persona joven que corta con el perfil empresarial que se ha dado tanto a nivel andaluz como malagueño”, argumenta. “Ha demostrado su apuesta por la concertación y el diálogo social”, añade. Seguro que eso le vendrá bien para afrontar la delicada situación de la economía andaluza.