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El San Sebastián solidario y social

La capital guipuzcoana celebra el primer acto oficial de su día grande La entrega de Medallas al Mérito Ciudadano reconoce la labor de aquellos que se han volcado con los demás

Izagirre (izquierda) junto a los premiados con la medalla del Mérito Ciudadano.
Izagirre (izquierda) junto a los premiados con la medalla del Mérito Ciudadano. JAVIER HERNÁNDEZ

San Sebastián cuenta las horas que restan para el comienzo oficial de su día grande, esta medianoche, pero hasta entonces, la entrega de medallas al Mérito Ciudadano ha servido de aperitivo. El acto ha tenido como protagonista la solidaridad y labor social de aquellos que casi han dedicado una vida, una carrera profesional o su tiempo libre, a la ayuda de los demás. Los premiados de este año, la asociación de servicios sociales Erroak Sartu, el coordinador del Plan vasco contra el Sida, Daniel Zulaika, el presidente del Ateneo guipuzcoano, Ángel García Ronda, el Teléfono de la Esperanza y las familias que acogen niños saharauis han recibido de manos del alcalde, Juan Karlos Izagirre, el reconocimiento.

El primer edil ha destacado durante su intervención la labor de estos donostiarras, su "generosidad" y "dedicación", en un acto celebrado en el salón de plenos del Ayuntamiento, en el que han estado presentes los miembros de todos los grupos con representación en el Consistorio, además de la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejeria, y la presidenta de las Juntas Generales del territorio, Loitzhune Txarola.

"Están cayendo los últimos granos de una época que fue muy dura y trajo mucho sufrimiento, pero que sacó lo mejor de nosotros, como personas, seres humanos y sociedad", ha destacado Zulaika, que ha querido dedicar el premio a todas las personas que desde mediados de los años 80 se han involucrado en la lucha contra el Sida. "Sólo me corresponde un trocito", ha destacado, para recordar luego a aquellos primeros jóvenes que murieron a causa del virus, sus familias u otros especialistas que les acompañaron.

También ha considerado de obligado reconocimiento dedicar el galardón a todos los voluntarios que hacen posible el Teléfono de la Esperanza su presidente, Juan Carlos Redondo, quién ha destacado el trabajo de apoyo y acompañamiento que realizan todas esas personas anónimas que contestan al otro lado de la línea. "Escuchar libera del desconcierto y la confusión. Escuchar es empezar a curar", ha destacado.

La labor solidaria además ha estado protagonizada por Igone Virto, directora de Erroak Sartu, asociación especializada en la inserción social y laboral de personas con dificultades, que en sus 25 años de andadura ha ayudado a 25.000 personas. "Es muy emocionante recibir este reconocimiento en un momento de crisis porque destaca el valor y fuerza de este equipo", ha subrayado además de desear "haber podido ayudar a encontrar su camino", a todas esas personas que han pasado por la asociación.

Vicenta Benítez, en representación de las familias que cada verano acogen en sus casas a niños saharuis, ha destacado el "compromiso claro" de todas ellas contra "una situación de injusticia", además de aportar la nota reivindicativa al gritar al final de su intervención "por un Sáhara libre".

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También con aires reivindicativos, García Ronda ha defendido el papel de la cultura, "es imprescindible, no es un adorno. Es absolutamente necesaria para vivir, que no sobrevivir", ha subrayado, para destacar la idiosincrasia liberal de San Sebastián y su lucha por la libertad.

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