Condenado a prisión un funcionario de la Politècnica por estafa continuada

La sección quinta de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a siete meses de prisión a un funcionario de la Universitat Politècnica de Valencia por un delito de estafa continuada. El hombre, que trabajaba como jefe de la unidad administrativa de uno de los departamentos, facturó a la universidad más de 22.500 euros en materiales para acondicionar su casa. Entre los artículos facturados se encuentra un televisor Led, dos cámaras de vídeo, comida para perros o dos collares electrónicos. La sentencia, hecha pública este jueves por el Tribunal Superior de Justicia valenciano, es firme y contra ella no cabe recurso.

El condenado, que carecía de antecedentes penales, tenía el cargo de Jefe de Unidad Administrativa del Departamento de Ingeniería Electrónica en la Universidad Politécnica de Valencia. Según la sentencia, "dicho cargo le permitía gestionar e imputar contablemente las propuestas de pago de dicho departamento, así como la gestión de la caja fija o de los fondos a justificar".

De esta manera, continúa la sentencia, "aprovechando las posibilidades que dicho cargo le ofrecía, a pesar de que no tenía capacidad de disposición para contratar o adquirir bienes o servicios por cuenta de la Universidad Politécnica", el condenado "contactó con diversos proveedores, concertando el suministro de mercancías y servicios". El funcionario "los hizo suyos, conforme al plan ideado, destinándolos, en su mayoría, a la habilitación de su vivienda".

Entre los encargos facturados a fondos de la universidad se encuentran paneles térmicos por importe de 2.986 euros; un televisor LED de 1.391,08 euros y un mando a distancia de 84,71 euros; una cámara de vídeo, por importe de 1.230,26 euros; una PDA y un teléfono móvil, por 402,23 euros; comida para perros, por 380 euros o dos collares electrónicos, por 815,80 euros.

Cuando los servicios de fiscalización de la Universidad Politécnica advirtieron las irregularidades lo lo pusieron en conocimiento del funcionario que devolvió de manera íntegra los 22.537,99 euros que sumaba el importe total facturado. La Universidad Politécnica no reclama indemnización por estos hechos.

El empleado público ha sido condenado a siete meses de prisión por un delito continuado de estafa y se ha contemplado el atenuante de la restitución del importe estafado. Además, el funcionario ha sido condenado a "inhabilitación especial para empleo o cargo público por tiempo de seis meses así como al pago de las costas del presente procedimiento". La sentencia es firme y contra ella no cabe recurso.