Teyoland cierra y anuncia que relanzará la tienda en el primer trimestre de 2014

Teyoland, la gran superficie de mueble, bricolaje y jardín de capital valenciano situada en Feria Valencia, ha cerrado hoy sus puertas al tiempo que ha anunciado que relanzará la tienda en el primer trimestre de 2014 con una política "más agresiva" en precios y un plan de negocio "ajustado" a la situación actual.

Teyoland, que ha estado en marcha desde el pasado 5 de junio, afirma en un comunicado que va a reorganizar su modelo de negocio para "mejorar el servicio y la configuración de nuestras instalaciones, así como ofrecer una mayor gama de productos y precios más competitivos".

La empresa, que fue promovida por Ignacio Tello, que ha sido apartado de la primera línea de la dirección, se ubica sobre una superficie de 20.000 metros cuadrados en el pabellón 7 de Feria Valencia, a la que adeuda dos meses de alquiler.

Según el acuerdo con Feria Valencia para un periodo de siete años, esta recibirá el 4% de la facturación de la empresa, con un mínimo garantizado de un millón de euros anuales.

La empresa, regida ahora por una nueva dirección, asegura que está llegando a acuerdos con los proveedores "con gran acogida por su parte" para relanzar la tienda en el primer trimestre de 2014.

Teyoland continúa con los mismos socios que, según indica, apoyan la decisión de reorganización de la empresa aunque se está trabajando en la entrada de nuevos socios y en la ampliación de capital.

Para la nueva etapa, se ha cambiado la dirección comercial y actualmente se está trabajando tanto en el nuevo plan de viabilidad como en la reorganización de la empresa, unos cambios que según Teyoland "cuentan con la total implicación y participación activa de la plantilla".

"A pesar de las dificultades, estamos muy ilusionados e involucrados con el nuevo proyecto", según la empresa.

En el momento de su apertura en junio, contaba con 300 proveedores, el 95% españoles y la mitad valencianos, si bien también con una notable presencia de productos catalanes (20%) y murcianos (10%). Para el primer año, la empresa confiaba en alcanzar una facturación de 40 millones de euros y un volumen de visitantes a la tienda física de un millón.

En septiembre decidió prescindir de alrededor de un tercio de los cerca de 300 empleados que contrató para la puesta en marcha del proyecto.