Condenado el CatSalut por el retraso en el tratamiento de un cáncer de riñón

Un juzgado de Barcelona ha condenado al Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) a indemnizar con más de 162.000 euros al marido y los cinco hijos de una mujer de 64 años que falleció a causa de un cáncer de glándulas suprarrenales tras esperar 11 meses una operación. El Hospital Arnau de Vilanova de Lleida incurrió en un retraso "injustificado" que empeoró las posibilidades de supervivencia de la paciente, considera la sentencia.

M.G.M. fue remitida al hospital de forma urgente por su médico de familia en abril de 2007 al detectarle una hipopotasemia, un desequilibrio causado por el descenso en los niveles de potasio. En el Arnau de Vilanova, la nefróloga detectó una de las manifestaciones del cáncer suprarrenal (situado por encima del riñón) y encargó que se le realizara un TAC abdominal. El hospital extravió los resultados, por lo que la especialista no pudo considerarlos en la siguiente visita con la paciente, en mayo. En lugar de encargar otra prueba urgente, la médica la citó para hacerle una ecografía en el mes de septiembre.

Con las pruebas en la mano, la especialista diagnosticó un tumor de glándula suprerrenal y derivó a la paciente al cirujano, que no la operó hasta febrero de 2008, casi un año después de la primera visita en el centro. La mujer murió en julio de 2008, un mes después de ingresar en el hospital con dolores en el abdomen y el cáncer en situación de metástasis. La sentencia del Juzgado Contencioso Administrativo número 12 considera “acreditado que se ha producido un lapso de tiempo de nueve meses que conllevó el crecimiento tumoral” con “peor pronóstico de supervivencia y menos posibilidades de curación” para la paciente.