La Cubierta niega que haya incumplido sus obligaciones

El tira y afloja entre el Ayuntamiento de Leganés y el gestor de La Cubierta a raíz de los mermados festejos taurinos de la ciudad escribió ayer un nuevo capítulo. En una trinchera, el alcalde del municipio, Jesús Gómez (PP), que anunció la retirada de la concesión de la plaza de toros a la empresa Asuntos Taurinos y Espectáculos S. L., después de que esta se plantara y cancelara parte de la programación prevista en las fiestas de agosto. En el otro bando, Julio Torres, consejero delegado de la empresa, con experiencia como abogado del Estado, que reclama hasta 242.685 euros al Consistorio y que anuncia que recurrirá la decisión en los tribunales.

El intercambio de golpes es continuo. Ayer fue Torres quien arremetió contra el alcalde convocando a los medios de comunicación por primera vez desde que empezó el rifirrafe. Aseguró que no incumplió el pliego de condiciones de la concesión —que le obliga a “celebrar las ferias taurinas de en agosto y octubre, así como los encierros tradicionales”— al cancelar los eventos que tenía programados para el sábado 17 y el domingo 18. Argumenta que con lo celebrado el viernes —encierro, suelta de reses y corrida— cumple con sus obligaciones. Aseguró también que hay 34 recursos interpuestos ante el Ayuntamiento y que, tras cinco sentencias firmes en contra, el juzgado de lo contenciosos-administrativo ha llegado a decretar el embargo de bienes municipales. A Gómez no le consta nada de esto, según explicó a este periodicó, y afirmó que la suma de dinero que pide Torres es exagerada. Sobre las sentencias dijo que las vienen de litigios iniciados antes de que él llegara a la alcaldía.

La concesionaria anuncia que recurrirá la decisión de Gómez

El regidor admitió que en el reglamento taurino no se define en qué debe consistir una feria, pero se basa en las experiencias pasadas para concluir que este año no se ha cumplido con lo mínimo exigido y que es razón suficiente para retirar la concesión. “Años atrás ha llegado a haber hasta dos y tres corridas de toros buenas en las fiestas de agosto. Decir ahora que con una solo es suficiente es tener la cara bastante dura”, señaló. El alcalde esgrimió además que en las concesiones, la facultad interpretativa corresponde a la administración. “Hemos sido muy benévolos”.

Este enfrentamiento se remonta a 2011, cuando el Ayuntamiento publicó un decreto mediante el cual fijaba las tarifas para los festejos taurinos y la gratuidad de los encierros. El alcalde argumenta que esta decisión está fundamentada en el peligro que supone permitir que la gente se cuele por la entrada de los corredores en la llegada del encierro a la plaza “como ha ocurrido en otras ocasiones”. En anteriores legislaturas, el problema se había resuelto mediante la compra de las entradas por parte de la administración.

Torres describió al alcalde como un “cacique” y anunció que piensa emprender todas las acciones judiciales necesarias. “Incluso penales”.