La semana por delante

cine

Palomitas en un Corvette

La experiencia del autocine parece un recuerdo salido de una película de los años 60 o 70. Aparcar el coche en un descampado, acurrucarse con la pareja, sacar las palomitas y subir la ventanilla. El cine de verano del parque de la Bombilla quiere rememorar esta imagen y aparcarla en el terreno del siglo XXI. Hoy domingo, unos 40 coches americanos, desde los más clásicos hasta los más modernos, servirán de butacas para los espectadores que vayan a disfrutar del cine al aire libre en el parque de La Bombilla.

“Queremos hacer un homenaje a los antiguos autocines que veíamos en las películas americanas en las que estaban el chico y la chica, aunque bueno, la verdad es que la peli importaba menos", bromea David Lluesma gerente del Fescinal, el festival de cine al aire libre.

Las películas que se proyectan tienen mucho que ver con el mundo de los coches. En una de las pantallas que pone el parque se podrá ver El mensajero a las 22.15. Enseguida, Fast & Furius 6. “Son dos películas de persecuciones, trepidantes y, sobre todo, americanas y de coches”, explica Lluesma. Para los que quieran desviar la mirada y encontrar algo más liviano, una segunda pantalla exhibirá el filme de dibujos animados Blackie & Kanuto, a las 22.15. La entrada general para todas ellas es de seis euros.

Corvette, Chevrolet, Ford, Chrisler, Caddillac, son algunas de las diferentes marcas de estos coches de todas las edades y colores, que parecen salidos de un museo. “Los coches son prestados de un club de coches clásicos americanos (MAC), aunque también los hay modernos”, explica. Lluesma, que es vicepresidente y fundador de este club bromea con la iniciativa de convertir los coches en butacas. “Lo que hemos hecho es algo que nunca se debe hacer, que es mezclar el hobby con el trabajo”, dice sonriendo.—SUSANA GONZÁLEZ VEJO

danza

Inquietudes del flamenco

El Original Ballet Flamenco sigue centrando la oferta de danza en la capital. Abre Pedro Córdoba (Sabadell, 1974) los días 20 y 21 en el Pequeño Gran Vía con su propuesta 2mil y pico, un recorrido personal por los palos del flamenco donde estará acompañado en escena de las bailaoras Belén de la Quintana y Guadalupe Torres. El bailarín-bailaor catalán argumenta que en su trabajo “no hay fusión ni mezclas, ni incursiones en otro tipo de danzas”, con la conciencia de ser parte de una generación que ha crecido en el universo virtual de Internet. Estará acompañado por la guitarra de Manuel Castilla y las voces de los dos Ismael de la Rosa: el mayor y el junior.

Ya al día siguiente, está de nuevo Pedro Córdoba en el elenco de la compañía de Rafaela Carrasco (Sevilla, 1972), que cierra el festival del 22 al 26 en el escenario mayor del Compac Gran Vía. Será la obra Con la música en otra parte, con la colaboración especial de la Camerata Flamenco Project, donde el elenco de Carrasco (máxima responsable en lo coreográfico y una de las más inquietas creadoras de su hornada) se completa con Ricardo López, José Maldonado y David Coria. Con la música… propone investigar además de la relación natural entre danza, música, tiempo y espacio, con el color, entendiéndolo como la característica más personal de cada intérprete y de cada autor. A tal propósito conjugan las guitarras de Jesús Torres y Juan Antonio Suárez y el sensible canto de Antonio Campos.— ROGER SALAS

clásica

Grandes piezas en Navalafuente

No busquen en la iglesia de San Bartolomé de Navalafuente las piezas más vanguardistas del repertorio, porque no las encontrarán. La Orquesta de Cámara de la Universidad Rey Juan Carlos ha preparado para el próximo sábado una selección de grandes piezas de la historia de la música. De la Música acuática de Haendel a la Suite número 3 de Bach, haciendo una parada de rigor en dos de esas piezas que forman parte de nuestro imaginario colectivo: el Canon de Pachelbel y el Adagio de Albinoni. Y para abrir el concierto, una gran obra de Mozart: el Ave Verum Corpus, que nos traslada una paz en clave clásica que pocas piezas pueden conseguir. La Orquesta de Cámara de la Rey Juan Carlos está formada por alumnos de la Escuela Superior de Música Reina Sofía. — MIGUEL PÉREZ MARTÍN

teatro

Variedades circenses

Es un espectáculo eminentemente visual, que se puede disfrutar con toda la familia, en el que se dan la mano el circo y las variedades y al que se ha dado el nombre de The Hotel (Teatro Nuevo Apolo), por aquello de que se ha inspirado en la atmósfera de los hoteles clásicos de Nueva York de los años cuarenta y cincuenta del pasado siglo, así como en las comedias musicales de enredo del Hollywood dorado.

Acrobacias, números de circo, humor, coreografías de aire cabaretero, ritmos de jazz, blues, clásicos musicales de Broadway y talentosos y habilidosos artistas de primer nivel internacional, rescatados de importantes elencos de El Circo del Sol, Cirque Eloize y Circo de Moscú, que ofrecen números de contorsión, telas aéreas, rueda alemana, barra, malabares, etecétera.— ROSANA TORRES

'reggae'

Patriarcas del 'ska'

Su carrera comenzó el mismo año que la de los Beatles. Medio siglo después, la banda sigue en activo con otros músicos y, como los de Liverpool, son el grupo fundamental dentro de su género. Sin los jamaicanos The Skatalites no se entendería el ska más cercano al reggae. De seguir vivos, sus miembros fundadores rozarían ahora mismo los 80 años. De los primeros Skatalites solo sobrevive el saxofonista Lester Starling, que sigue al frente de la poderosa sección de vientos de la banda.

Formaron parte en su país de origen de la influyente factoría Studio One, el sello más prestigioso de los géneros cercanos al primer reggae y ska. En esa casa dieron con un sonido característico en los sesenta que pasearon por medio mundo. El martes llegan a la sala de conciertos Gruta 77 (Cuclillo, 6) acompañados por los madrileños SkainHead, con músicos más jóvenes que los que revolucionaron el género hace décadas, pero siempre fieles a su espíritu.— JUANJO ABAD