Detenidos tres pescadores andaluces y tres gibraltareños por contrabando
El Gobierno del Peñón acusa a los trabajadores de tráfico ilegal de tabaco Otros tres vecinos de la colonia han sido también acusados
La policía de Gibraltar ha detenido a las cuatro de la mañana de este miércoles a tres pescadores españoles que se encontraban faenando con artes de trasmayo frente al Peñón. Los agentes les acusan de supuesto contrabando de tabaco. Además, otros tres vecinos de la colonia han sido acusados.
La operación comenzó de madrugada en la playa La Caleta de Gibraltar, donde fueron detenidos tres vecinos de Gibraltar, dos de 38 años y uno de 42, y fue intervenida una lancha neumática. Supuestamente, estos entregaban tabaco a los tres pescadores de 46, 49 y 41 años, que se encontraban en el pesquero San Francisco, con base en el puerto de La Atunara, en La Línea de la Concepción.
La policía Gibraltar aclaró que esta operación se venía investigando antes de que estallara el conflicto pesquero y la desvincularon de la situación creada por el enfrentamiento entre el Peñón y España. Los agentes resaltaron que la intervención ha sido posible con la colaboración de la Guardia Civil. La incautación de tabaco es de media docena de cajas.
Los detenidos podrían pasar hasta 24 horas en las dependencias policiales de Gibraltar mientras la fiscalía determina si eleva los cargos policiales a la Corte de Justicia. Los detenidos se enfrentan a una multa por el valor del tabaco intervenido y podrían quedar en libertad con cargos hasta que se pronuncie la justicia.
Este último incidente se registra en un contexto de tensión que ha llevado al primer ministro británico, David Cameron, a telefonear al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para trasladarle su "gran preocupación", según ha informado la agencia Reuters, citando a Downing Street.
El vicepresidente de la Junta y consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales, Diego Valderas, calificó la situación de "conflicto sin diálogo" y lamentó el “sacrificio” de los trabajadores españoles que se están viendo afectados. También criticó el comportamiento de las autoridades españolas: “No es el camino adecuado para lograr una solución inmediata entre el Gobierno de España y las autoridades de Gibraltar”.
La reacción de Valderas responde a la petición de la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, para que los trabajadores españoles en Gibraltar tengan “paciencia” y sean "solidarios" con los pescadores.
"El Gobierno pide sacrificio siempre a los mismos, a los trabajadores. El elemento del conflicto sin diálogo y que presiona sobre ciudadanos a los que se les pide más sufrimiento, no es el camino para una solución inmediata", replicó Valderas.
Valderas calculó que la situación perjudica en estos momentos a más de 7.000 trabajadores españoles y reclamó "medidas de verdad no contra aquel que pasa algún cartón de tabaco, sino contra lo que realmente ha representado Gibraltar en muchos casos: la evasión de capitales y el fraude fiscal a más grande escala".
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