Galicia aprueba la primera fusión de municipios en España desde 1981
La comunidad pasará de 315 a 314 Ayuntamientos tras las unión de de Oza y Cesuras
La crisis ha llenado los discursos políticos de apelaciones a la simplificación administrativa, pero hasta ahora las medidas concretas al respecto han sido escasas. De Galicia llega una de las primeras, con poca trascendencia real, aunque de fuerte carga simbólica: el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo dio este jueves la aprobación definitiva a la fusión entre los municipios coruñeses de Oza dos Ríos (3.227 habitantes) y Cesuras (2.174). En España no se unían Ayuntamientos desde 1981, cuando se integraron dos localidades burgalesas. En Galicia la anterior fusión municipal se produjo hace 45 años.
El nuevo municipio, que llevará el salomónico nombre de Oza-Cesuras, será una realidad en apenas unos días, en cuanto el Diario Oficial de Galicia y el Boletín Oficial del Estado publiquen la resolución que aprobó el Consejo de Gobierno de la Xunta. El proceso se inició hace 15 meses y no ha estado exento de tensiones y debates jurídicos. De hecho, el secretario general del PSOE en A Coruña, el exministro de Justicia Francisco Caamaño, anunció que su partido recurrirá la decisión en los tribunales. Los dos municipios que se integran están gobernados por el PP. Cuando Feijóo anunció la fusión de las dos localidades, en el debate parlamentario sobre el estado de la autonomía celebrado el año pasado, su propósito era abrir un amplio proceso para reducir sustancialmente el mapa municipal de Galicia, que, con 2,7 millones de habitantes, tendrá a partir de ahora 314 Ayuntamientos. Pero el presidente de la Xunta se topó muy pronto con las resistencias de los alcaldes, empezando por los de su partido, el PP. Los responsables municipales amenazaron con un motín si se les imponían fusiones por la fuerza. Feijóo ha tenido que conformarse, de momento, con el acuerdo entre Oza y Cesuras, que calificó de “histórico” en no menos de media docena de ocasiones.
El presidente gallego insistió en que seguirá promoviendo la integración municipal, siempre que sea con carácter “voluntario”. Aseguró que hay otros procesos en marcha en Galicia, pero evitó decir cuáles y cuándo podrían concretarse. “Somos pioneros en España”, presumió Feijóo, quien señaló que 8.000 municipios en todo el Estado es un número “excesivo”.
El proceso de fusión ha pasado en los últimos meses por diversas vicisitudes, empezando por el rechazo de la oposición en ambos municipios —socialistas y nacionalistas— y de algunos colectivos vecinales. También ha habido fuertes debates jurídicos, ya que las leyes gallega y estatal son contradictorias respecto a cómo debe decidirse una unión entre Ayuntamientos. La norma general en España obliga a que cuente con el respaldo de al menos dos tercios de los concejales de cada corporación, un requisito que no se cumplió en el caso de Cesuras. Sin embargo, la ley gallega permite aprobarla únicamente con la mayoría absoluta. El Consello Consultivo de Galicia dictaminó que prevalece la norma autonómica, pero el PSOE no lo entiende así y acudirá a los tribunales.