Los socialistas gallegos convocan sus primarias para el 7 de septiembre
Pachi Vázquez asegura que cuenta con el aval de la dirección socialista
Galicia será la primera federación socialista en la que la militancia podrá escoger directamente mediante voto secreto y en urna a su secretario general. La consulta se celebrará el próximo 7 de septiembre y permitirá a las bases decidir quién sucederá a Pachi Vázquez al frente del partido. Tres semanas después, el 29 de septiembre, un congreso con delegados (tal y como exigen los estatutos del PSOE) se limitará a refrendar lo decidido en la consulta.
En su intervención al inicio del sanedrín, el líder del PSdeG reclamó a los suyos que aceptasen dilatar el proceso dos meses más, tal y como había pedido la dirección federal, para hacerlo de la mano de Ferraz. "Vale la pena pagar este peaje", dijo Vázquez a los casi tres centenares de militantes que le escuchaban en un hotel de Santiago. El secretario general hizo ver que cuenta con el compromiso de Madrid para que el próximo comité federal del 20 de julio avale el experimento gallego antes de que la modificación de los estatutos extienda las primarias al resto del partido, un anuncio que hizo el jueves por sorpresa el secretario de Organización, Óscar López.
En la votación a mano alzada durante el comité nacional que se alargó hasta las 23:30 de ayer, 131 dirigentes (el 62%) apoyaron el nuevo calendario, que supone retrasar durante dos meses el cónclave previsto para julio. El aplazamiento recibió 8 votos en contra. Y 71 dirigentes decidieron abstenerse, entre ellos los miembros de Novo Socialismo Galego, una plataforma liderada por el exalcalde de Fene, Iván Puentes, que sigue tanteando apoyos para ver si opta a liderar el PSdeG.
Entre los entusiastas del nuevo procedimiento, tomó la palabra durante el debate a puerta cerrada el exministro y secretario provincial en A Coruña, Francisco Caamaño, firme defensor de las primarias desde siempre, y a quien muchos compañeros ven ahora en disposición de presentarse. El presidente de la Diputación de Lugo, José Ramón Gómez Besteiro, decidió no participar en la votación pero dentro advirtió que "Galicia no puede esperar más" por los cambios de su partido y confió en que "este sea el último calendario" para el congreso. Justo antes del comité nacional el núcleo duro del PSdeG ya había avalado el plan. De las cuarenta personas que componen la Ejecutiva, solo dos se manifestaron en contra.
En su discurso abierto a la prensa ante el comité gallego, Vázquez pidió "para alcanzar el máximo grado de democracia” que se aceptase el retraso que reclamó la dirección federal. Según comprometió, Ferraz ofreció garantías de que dará luz verde a este procedimiento que venía rechazando durante las últimas semanas y que propició el enfrentamiento con Santiago qie incluyó la amenaza de crear una gestora en Galicia. El reglamento aprobado anoche contempla que la consulta a las bases en las distintas agrupaciones socialistas se celebre el 7 de septiembre y que el 29 de ese mismo mes, un congreso extraordinario con delegados ratifique el nombre del secretario general preferido por la militancia. Los aspirantes podrán presentar sus candidaturas del 22 de julio al 2 de agosto.
El proceso pivota sobre esa consulta que dará voz por primera vez a todos los militantes para designar al futuro líder del partido y también a los delegados que participarán en el congreso. La misma noche del 7 de septiembre, explicó Vázquez, “se sabrá” el nombre del secretario general. El cónclave posterior cumplirá con la formalidad de ratificar al designado por las bases. “Propongo que tomemos el acuerdo de respetar la decisión de la militancia para nombrar secretario general a quien obtenga mayor número de votos”. “Vamos a decidir si damos el paso definitivo para alcanzar el máximo grado de democracia” y “dejar una honda huella en la historia del partido”, animó el líder gallego a los suyos en el discurso de apertura del comité nacional. Vázquez trató de cerrar las heridas con Madrid agradeciendo el “esfuerzo y la comprensión” de la cúpula de Ferraz -con la que mantuvo un pulso durante los dos últimos meses para forzar la consulta en Galicia- y vendió este avance hacia la democracia interna como “un triunfo de la militancia socialista con la contribución del PSdeG”.
Para liderar el partido, cada precandidato deberá presentar unos 1.000 avales que corresponden con el 10% de la militancia socialista en Galicia. Con tono solemne, Pachi Vázquez se mostró convencido de que la nueva fórmula de elección de su sucesor –de momento, él mantiene la incógnita de si optará a la reelección aunque los dirigentes más cercanos a él lo dudan- no solo fomentará la participación sino que permitirá al PSdeG “ganar en cohesión y unidad”. En cuanto al congreso extraordinario, el reglamento amplía la representación de las bases puesto que establece 750 delegados, uno por cada 15 militantes. “Será la máxima representación en la historia de nuestro partido”, defendió el secretario general, que evitó dar ninguna pista sobre si optará a la reelección, algo que prácticamente descartan sus colaboradores más cercanos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.