Los vecinos de Natzaret, los grandes olvidados en la cesión de la dársena

La Asociación de Vecinos de Natzaret solicitó el mes pasado a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la inclusión de la frontera del puerto con Natzaret en la operación de cesión de la dársena, pero no los atendió, denuncia este colectivo.

Barberá delegó en el concejal Cristobal Grau "y aún no hemos tenido ningún contacto", ha dicho el presidente de la asociación, Julio Moltó. Tampoco la Autoridad Portuaria ha concretado ninguna fecha para entrevistarse con el vecindario, a pesar de que el Ayuntamiento de la ciudad recibe la marina 27 años después de cederle la playa de Natzaret.

Durante estas casi tres décadas la ciudad, y sobre todo este barrio del marítimo, ha perdido la huerta de la Punta, reducida para dar cabida a la Zona de Actividades Logísticas (ZAL), la playa de Natzaret o el final del viejo cauce del río Turia. 

También ha expirado la cesión del parque de Marazaul al Consistorio, conseguida gracias a la movilización de la asociación vecinal que rescató en 1986 unos 40.000 metros cuadrados de playa de su destrucción por la ampliación del sur del puerto para convertirlos en el citado parque.

"La no renovación de la cesión del Parque hipoteca el futuro de la recuperación de la fachada marítima sur en Natzaret, y deja en manos del puerto la ejecución del desahucio de la zona verde conquistada, que queda en el limbo jurídico", explica Moltó.

La alcaldesa Barberá y la ministra Pastor se olvidaron ayer 24 de abril de 2013, una vez más, de saldar la deuda histórica contraída con el barrio, ha subrayado el colectivo vecinal.