Euskadi y Navarra piden a Fomento que revise la unión ferroviaria con la ‘Y vasca’

Los Gobiernos de Euskadi y Navarra pedirán al Ministerio de Fomento que “reactive” el estudio y diseño del enlace de la Y vascaferroviaria con la Comunidad foral entre Ezkio-Itxaso y Pamplona. La consejera vasca de Medio Ambiente, Ana Oregi, y el consejero navarro de Fomento, Luis Zarraluqui, se reunieron este martes en Vitoria para analizar diversos temas de infraestructuras de transporte, logística y aguas que interesan a ambas autonomías, según informó el Ejecutivo vasco en una nota.

En el encuentro, que ha servido como primera toma de contacto entre ambos gobiernos, los dos mandatarios han hablado del enlace del trazado del tren de alta velocidad con Navarra, recogido en un protocolo suscrito en 2010 que “todavía está inactivo. Por eso, Oregi y Zarraluqui acordaron solicitar al Gobierno central que reactive ese protocolo y retome el estudio de esta conexión.

En Navarra ya está en marcha el tramo entre Castejón y Cadreita con un coste de 28,4 millones y un plazo de ejecución de 28 meses. Las obras entre Cadreita y Villafranca están ejecutadas ahora al 51% y finalizarán en marzo del próximo año.

Por su parte, en el ramal guipuzcoano de la Y vasca todos los tramos están en ejecución o finalizados. Son 59,1 kilómetros, el 77,6 % del trazado, a falta de que se definan los accesos definitivos a San Sebastián e Irún y la conexión con Francia.

Los dos consejeros también analizado la oferta de los puertos de Pasaia y Bilbao para las necesidades comerciales e industriales de Navarra. La gestión paisajística ha sido otro de los temas abordados en la reunión, en la que ambos representantes han coincidido en la necesidad de elaborar planes conjuntos y coordinados en unidades paisajísticas comunes, que busquen la continuidad entre zonas limítrofes, indicó el Gobierno de Navarra en un comunicado.

También acordaron la elaboración de una instrucción técnica coordinada para solicitar informes a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) en relación al desarrollo de planos urbanísticos, con la finalidad de agilizar los trámites administrativos necesarios.

Con respecto a la Y vasca, EH Bildu propuso su paralización, además de emitir deuda pública, con el fin de lograr 1.000 millones de ingresos para las cuentas de Urkullu.