La Delegación de Madrid no ha recibido ninguna petición para el 25-A

La Delegación del Gobierno en Madrid no ha recibido ninguna comunicación de que se vaya a celebrar una concentración el próximo 25 de abril en los alrededores del Congreso. Así lo ha explicado esta mañana la titular de este departamento, Cristina Cifuentes, que ha recordado que existe una obligación por parte de los convocantes para cumplir lo que requiere la Ley Orgánica 9/83 del Derecho de Reunión. Esta norma establece que las protestas en la calle deben anunciarse con carácter previo a la autoridad gubernativa con al menos 15 días de antelación.

Según Cifuentes, el hecho de que no haya sido comunicada en plazo supone que la concentración que está organizando la llamada Plataforma en pie resultará ilegal. “Este colectivo está colgando cosas muy estrafalarias en su página web, como el decir que a partir del 25 de abril va a haber un cambio en la situación política de este país”, ha afirmado la delegada.

La responsable de la Delegación también se ha referido a la celebración del Maratón de Madrid el próximo 28 de abril, sobre todo, tras los atentados de Boston del pasado lunes. Ha llamado a la tranquilidad a todos los madrileños y en especial a los participantes. En su opinión esta prueba transcurrirá con total normalidad. La reunión que tiene prevista para el próximo lunes con carácter previo y para preparar el despliegue de la policía la ha enmarcado en la actividad habitual para este tipo de acontecimientos masivos, sobre todo, cuando lo requieren los organizadores. “El objetivo no es poner la venda antes que la herida, sino garantizar la tranquilidad de los ciudadanos y ofrecerles una presencia policial adecuada a lo que supone la prueba”, ha añadido.

Cifuentes se ha congratulado además de que la fiscalía no viera responsabilidades de la Policía Nacional y de la propia Delegación del Gobierno en la fiesta del Madrid Arena, como explicó ayer el fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix. “La actuación del Cuerpo Nacional de Policía fue correcta y dentro del marco del cumplimiento del orden público. Su misión consistió en estar en los aledaños del Madrid Arena para cumplir tareas propias de seguridad ciudadana. Los dos agentes que fueron tenían la misión de trasladar a la Comunidad de Madrid la documentación y asistir a la apertura de puertas, además de pedir a los responsables de la fiesta que avisaran al 091 si ocurría algo, como hicieron”, ha concluido.