Las Cortes respaldan que las Fallas sean patrimonio inmaterial de la humanidad
La declaración afirma que son "la máxima expresión de una tradición festiva y cultural"
Las Cortes valencianas han manifestado hoy su apoyo a la candidatura elaborada por la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia para que las Fallas de Valencia sean inscritas en el listado de patrimonio cultural inmaterial de la humanidad de la Unesco.
El pleno de la Cámara ha arrancado esta mañana con la lectura de una declaración institucional que reclama esa consideración para las Fallas, que contribuirá a "realzar la autoestima y el prestigio de los valencianos como depositarios y usuarios" de la fiesta.
La declaración, leída por el vicepresidente primero de la Cámara, Alejandro Font de Mora, recuerda que en enero de 2011 el Ayuntamiento de Valencia acordó impulsar un expediente que iniciara el procedimiento para que la Unesco inscribiera la fiesta de las Fallas en la lista representativa del patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
En apoyo de esa candidatura, el año pasado el Consell declaró las Fallas como Bien de Interés Cultural Inmaterial, "reconociendo así su proyección internacional y su amplia implantación" en la ciudad de Valencia.
El texto aprobado recuerda, además, que hace un año el consejo de patrimonio histórico se reunió en Tarragona y seleccionó la candidatura de las Fallas para que el Gobierno de España la presentara ante la Unesco.
Las Cortes afirman que las Fallas constituyen en Valencia "la máxima expresión de una tradición festiva y cultural" que ha pervivido en las raíces del pueblo valenciano hasta la actualidad, y que ha supuesto la implicación directa de numerosas profesiones artesanales, desde carpinteros a orfebres o "poetas festivos". "Además, las fallas, como manifestación cultural, han contribuido directamente a mantener y transmitir nuestra lengua propia", reivindica el texto.
Las fallas son la manifestación de "la expresión viva, artística y cultural, satírica y popular de un pueblo, expresada en actos como la plantà, la ofrenda floral a la Virgen de los Desamparados y la cremà, con el fuego como elemento que convierte la falla en un monumento efímero", sostiene la declaración institucional, que será trasladada al Gobierno, al Consell, al Ayuntamiento de Valencia y a la Junta Central Fallera.
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