Málaga amenaza con un ERE para 300 trabajadores en la empresa de basura

El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre (PP), amenazó este lunes con aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a una cuarta parte de la plantilla de trabajadores fijos de la empresa mixta de recogida de la basura de Málaga (Limasa), que suman algo más de 1.200 empleados. Tras las huelgas de limpieza en Jerez, Granada y Sevilla, ahora son los trabajadores de Limasa los que han convocado paros a partir del próximo 22 de marzo.

El comité de empresa justifica su convocatoria ante la negativa del gobierno del PP en el Consistorio de respetar el último convenio laboral. El planteamiento municipal pasa por reorganizar los turnos de descanso y las vacaciones lo que evitaría las contrataciones eventuales y, en consecuencia, un ahorro anual de casi seis millones de euros.

Trabajadores y Ayuntamiento mantuvieron el pasado domingo una reunión de más de ocho horas que solo sirvió para alejar, más aún, las posturas. El presidente del comité, Manuel Belmonte, aseguró que el gobierno municipal pretende “chantajear” a los empleados con el anuncio del ERE. El regidor se mostró “optimista” sobre una posible resolución del conflicto laboral para evitar el paro y sus negativas consecuencias para la imagen de la ciudad en una fecha tan sensible.

De la Torre añadió que el ERE podría quedar aparcado si el personal fijo aceptara el cambio en los descansos y las vacaciones. El alcalde apeló a la “sensatez y la responsabilidad” de los trabajadores para evitar la huelga. Entre tanto, los grupos de oposición en al Ayuntamiento de Málaga (PSOE e IU) exigieron al equipo de gobierno del PP que inicie el proceso para rescatar la concesión. El 49% de la sociedad mixta está en manos del Consistorio y el 51% de las acciones lo gestionan FCC, Urbaser y, con menor peso accionarial, Sando y Unicaja.

La portavoz del grupo municipal socialista en la ciudad, María Gámez, reclamó este lunes al regidor que ponga en marcha el proceso para la municipalización del servicio de limpieza. Gámez calificó de “trágico” que la ciudad tenga una huelga en Semana Santa. El regidor de Málaga respondió a este respecto asegurando que el rescate del servicio no soluciona el problema y que no es el momento de plantearlo por el elevado coste que supondría para la ciudad.

Las negociaciones entre el comité de empresa y el equipo de gobierno popular llevan varias semanas en marcha. Incluso ha intervenido el Servicio de Mediación de Conflictos Laborales (Sercla) que este lunes dictó un laudo que daba la razón a los planteamientos propuestos por la empresa.

El documento, de obligado cumplimiento por ambas partes, da por buena la última propuesta expresada por la dirección de Limasa. De este modo, las vacaciones de los trabajadores —con un total de cinco semanas— se deberán repartir del siguiente modo: tres semanas las podrán coger entre los meses de junio a septiembre mientras que las otras dos habrá que consumirlas en cualquier otro mes.

En cuanto a los descansos, en verano serán siempre los fines de semana completos, mientras que el resto del año se hará, un día en domingo, y el otro día entre semana, de forma rotatoria. El comité aceptaría la modificación de los turnos a cambio de que sus días de asueto fueran sustituidos por eventuales al menos en un 80%, algo que rechaza la dirección.

Otro de los puntos del convenio que levantan ampollas tiene que ver con los puestos hereditarios. En la actualidad, 14 solicitantes están a la espera de que sus padres se jubilen para ocupar sus puestos. Los sindicatos aseguran que, con casi toda probabilidad, la plantilla admitirá la supresión.

Por su parte, la empresa acepta todas las reclamaciones de los trabajadores sobre los 551 euros de productividad en dos pagos en los ejercicios de 2014 y 2015. Los socios privados de Limasa renunciarán este año a los beneficios (650.000 euros), pero no aceptan rebajar el canon de asistencia técnica que les reporta más de dos millones anuales.