_
_
_
_

El arte del buen comer

Los tres cómicos, que actúan hasta el 24 de marzo en el teatro Compac con ‘Bits’, se sienten en Madrid como en casa. Pasean por restaurantes caseros y parques desconocidos

Los integrantes de Tricicle posan en la Gran Vía, su segunda casa artística.
Los integrantes de Tricicle posan en la Gran Vía, su segunda casa artística.LUIS SEVILLANO

1. Librería Gulliver. Es propiedad de un gran amigo, Manuel Domínguez. Es capaz de conseguirte cualquier libro antiguo que le pidas, una gozada. Además, nos pone al día de lo que hay que leer y ver (León, 32).

2. Auditorio Nacional. Los bonos valen entre 6 y 20 euros. No hay excusa para no ir cada domingo. La acústica del auditorio es sencillamente sensacional y la orquesta, mucho más que fantástica (Príncipe de Vergara, 146).

3. Casa Adolfo. Es un restaurante familiar y sencillo. Sirven comida de verdad, de cuchara. Hacen unas cremas de verduras que son una delicia no solo para los sentidos, también para el cuerpo. Casi puedes notar las vitaminas entrando lentamente en el sistema (Bravo Murillo, 27).

4. Jardines del Campo del Moro. En Barcelona hay muchos parques. Uno de los más bonitos es el de Montjuïc, pero tiene un defecto: es muy montañoso y, por tanto, un poco incómodo. En cambio, pasear por el Campo del Moro es muy placentero. Es precioso, recuerda a los jardines de Versalles y lo más curioso es que es desconocido para la gran mayoría de madrileños.

5. La Tasca Suprema y El San Mamés. Estos dos restaurantes nos encantan. Son de comida muy casera. Hacen unos callos buenísimos y unos garbanzos que te mueres de ricos. Los conocimos gracias a que tenemos muchos amigos gastrónomos, como nosotros, y el boca a oreja hace maravillas (Argensola, 7 y Bravo Murillo, 88).

Un trío de humor gestual

Paco Mir (Barcelona, 1957), Carles Sans (Badalona, 1955) y Joan Gracia (Barcelona, 1957) llevan actuando en Madrid desde finales de los ochenta. Acaban de prorrogar su último espectáculo, Bits, ante la buena acogida del público de la capital.

6. Restaurante Kabuki. Es un restaurante de alta cocina que fusiona la gastronomía japonesa con la castellana. Conocemos al chef, que siempre nos trata con mucho cariño. Eso sí, no tiene ningún rasgo oriental… ¡es de Burgos! Recomendamos el tuétano con pez mantequilla, un plato que no hemos encontrado en ningún otro lugar (Presidente Carmona, 2).

7. El Rastro. A partir de mediodía es imposible andar. Pero si vas sobre las 10 se puede disfrutar de un agradable paseo entre los tenderetes. Sin agobios. Antes se caracterizaba por ser muy de aquí, pero ahora se ven muchas más nacionalidades. El rastro ya no es castizo, sino mestizo.

8. La Tasquita de Enfrente. El dueño es muy cariñoso y, además, es fan de Ferran Adrià. Le gusta seguir el estilo de este cocinero, se inspira en él de alguna manera, aunque no hace platos minimalistas. Nos encantan las maravillosas almejas que prepara y el pichón es una auténtica delicia. El tartar de tomate es tan consistente que parece carne (Ballesta, 6).

9. Restaurante Caripén. Vamos desde hace más de 25 años y no han cambiado la carta desde entonces. No les ha hecho falta porque todo sigue estando espectacular. Además, tiene historia, ya que era el antiguo tablao de Lola Flores. Los mejillones al estilo belga, la pasta y la tarta de manzana, fina finísima, son algunos de nuestros platos preferidos.

10. La Gran Vía. Es el Broadway madrileño. Hemos tenido un montón de espectáculos en esta concurrida calle desde el año 2007: Sit, Garrick, Spamalot, Forever Young y ahora Bits. Ya es como nuestra casa. Además, es el epicentro de los grandes espectáculos y nosotros estamos aquí en cartel. La verdad es que somos unos privilegiados.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_