Griñán advierte que el “trato desigual” vuelve a movilizar a los andaluces
El PSOE andaluz corta el debate interno acerca de la ruptura con el PSC
En plena tormenta interna en el PSOE por la división con el partido hermano del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) y también en víspera del Día de Andalucía, José Antonio Griñán aprovechó ayer la sesión de control del Parlamento para enfatizar los motivos por los que hace ahora 33 años Andalucía accedió a su autonomía por la vía rápida de la Constitución, reservada exclusivamente para las llamadas comunidades históricas. “Fue por la igualdad”, dijo, una reivindicación que, según él, está ahora puesta en cuestión, ya que “hay un trato desigual” que “vuelve a movilizar” a los andaluces.
También dejó dicho que el proceso autonómico andaluz “se hizo de forma legal, pacífica, profundamente democrática y sin saltos en el vacío y apoyándonos en la Constitución”. Este recordatorio iba más bien dirigido a los socialistas catalanes que el día anterior rompieron la disciplina de voto y suscribieron una iniciativa presentada por los nacionalistas de CiU, ERC y los izquierdistas de ICV en el Congreso a favor del derecho a decidir de Cataluña en una hipotética consulta.
No obstante, Griñán hizo esta alusión sin citar de manera expresa lo ocurrido 24 horas en la Cámara baja. En el PSOE de Andalucía, la actitud del PSC les irrita profundamente y aunque puede haber una opinión mayoritaria de que tal vez ha llegado el momento de que el PSOE compita con sus propias siglas en Cataluña —como sugirió el portavoz parlamentario socialista, Francisco Álvarez de la Chica—, desde la dirección regional se va a cortar todo tipo de debate que incida en esa tesis.
Entre otros motivos, porque su secretario general y presidente de la Junta también lo es de la ejecutiva federal y como tal su papel es el de arbitrar y templar. Él mismo reconoció a EL PAÍS el pasado martes su malestar por la actitud de los diputados del PSC, pero también antepuso la mesura: “Hay que recomponer, no descomponer. Como presidente del PSOE, lo último que haré será proponer la ruptura. Estoy enfadado, pero mi obligación es poner paz. Eso sí, las líneas rojas deben estar claras”.
Tampoco el líder de la oposición y presidente del PP, Juan Ignacio Zoido, hizo mención al cisma socialista durante su intervención. Este le reprochó que haya puesto en marcha una estrategia reivindicativa en contra del Gobierno central que es el que “le está ayudando a pagar” las nóminas y a los proveedores. “Es usted el único dirigente del mundo que muerde la mano de quien le da liquidez”, dijo. “Yo no acostumbro a morder. El Gobierno me presta al 6%, más de doble de la inflación”, le replicó el socialista un tanto molesto.
Griñán ha negado que las movilizaciones de hoy estén pensadas contra el Gobierno de Rajoy, aunque no dice eso el manifiesto elaborado por las organizaciones convocantes, entre ellas Comisiones Obreras y UGT, que han pedido a los andaluces que salgan a la calle en contra de los recortes aprobados por el Ejecutivo central.
“Usted ve sombras donde no las hay, no se den por aludidos, ni se rasguen las vestiduras”, dijo el presidente andaluz, quien reprochó a Zoido la “ausencia” tradicional del PP en los actos institucionales del Día de Andalucía y las campañas en contra del Gobierno andaluz lanzadas por los conservadores, cuando el hoy líder del PP andaluz era el segundo de Javier Arenas como secretario general.
Zoido, que leyó sus dos intervenciones, responsabilizó al presidente de la Junta de “despilfarrar” el consenso entorno al nuevo Estatuto, al que el PP se sumó en el último momento en el trámite del Congreso para lavar el pecado original de la derecha andaluza en contra del proceso autonómico de Andalucía.
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