La ponencia de paz nace con un respaldo inferior a la de la pasada legislatura

Casi un mes es el tiempo que ha tardado el Parlamento vasco en sacar adelante la creación de una ponencia sobre paz y convivencia que prosiga con los trabajos iniciados hace un año, durante la pasada legislatura, por un grupo de trabajo de similares características. Pese al tiempo que el PSE, quien propuso inicialmente la iniciativa, se había dado para lograr el mayor consenso posible para su creación, lo cierto es que finalmente la constitución de este grupo ha sido aprobada en el pleno ordinario de este jueves solo con los síes de PNV y PSE y la abstención de EH Bildu. PP y UPyD han votado en contra.

La ponencia nace así con menos apoyos que la anterior —43 parlamentarios sobre 75, lejos de los 70 votos a favor de la legislatura precedente— y con un monumental enfado de la portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, contra PNV y PSE y la enmienda transaccional que han pactado para poner en marcha el nuevo órgano. El texto se recoge la intención de “continuar” con los trabajos de la ponencia anterior.

El principal escollo planteado por EH Bildu para apoyar la creación de la ponencia fue precisamente que la propuesta inicial hacía referencia a que este grupo inicie sus trabajos teniendo como base el “suelo ético” aprobado en julio pasado. Este planteamiento fue aprobado por PNV, PSE, PP y tres de los entonces cuatro parlamentarios de Aralar —Dani Maeztu, que votó en contra, es hoy el único que sigue en la Cámara, en la bancada de EH Bildu—. EA tampoco lo respaldó.

Si bien los socialistas habían asegurado que eliminarían la referencia a la ponencia anterior y que se limitarían a presentar un texto escueto para proponer su creación en un mes, finalmente PSE y PNV han apostado por esa mirada a los precedentes.

Mintegi, quien acostumbra a emplear un tono moderado en sus intervenciones, ha criticado esta vez, mostrando un gran enfado, que los partidos “hagan un llamamiento a la paz desde un ataque”, cambiando el texto inicialmente planteado sin consultar a su grupo. Ha calificado este hecho como “vergonzoso”, un “juego engañoso y que margina” y que basa los trabajos para la paz “en un folio y medio aprobado en el último momento. ¿Esto es sólido?”

Los socialistas recalcan que no están dispuestos a "rebajar las exigencias” a la izquierda abertzale

El portavoz socialista, José Antonio Pastor, ha recalcado que no están dispuestos a "rebajar las exigencias” a la izquierda abertzale y ha justificado el texto por el que han apostado en el último momento, calificando como “deslealtad” y “aprovechamiento de la buena voluntad de modo torticero” por parte de EH Bildu, al decir que la alternativa planteada “suponía una rebaja de la exigencia”.

Tanto Pastor como el peneuvista Iñigo Iturrate han coincidido en reclamar a EH Bildu que diga qué parte no le gusta del documento de mínimos aprobado por la ponencia anterior. Ese texto apunta que el respeto a los derechos humanos está por encima de cualquier causa política y que es preciso reconocer la verdad, la justicia y la reparación de todas las víctimas.

El PNV ha desgranado qué es lo que propondrá en la ponencia: búsqueda de acuerdos —“no renunciamos a consensos a lo largo de la legislatura”, ha dicho Iturrate—, seguimiento de las políticas en torno a la memoria y un “dictamen sobre política penitenciaria”. A ello ha sumado otros trabajos en materia de derechos humanos.

Mintegi ha censurado que se plantee la construcción de una memoria “tuerta, sorda y desmemoriada”, tras lo que ha hecho referencia al asesinato de Santiago Brouard por los GAL en 1984, la muerte de Iñigo Cabacas, el joven hincha del Athletic fallecido en abril pasado días después de recibir un pelotazo de la Ertzaintza, y a los “cero detenidos” por las “conculcaciones de derechos” de las Fuerzas de Seguridad del Estado. “Hay que reconocer todas las víctimas y todos los derechos”, ha concluido la portavoz abertzale.

Parece que algunos de ustedes están en sus intervenciones todavía bajo el control de ETA” Carmelo Barrio

Minutos antes, UPyD criticaba a los partidos por no aprobar una iniciativa suya planteada semanas atrás que reclamaba el esclarecimiento de los asesinatos por ETA de varios cientos de personas. Los socialistas han apuntado a que “la violencia no ha acabado aún”, poniendo como ejemplo los incidentes registrados en las gradas de Anoeta el pasado 29 de diciembre en el amistoso de fútbol Euskadi-Bolivia.

Desde el PP, Carmelo Barrio ha explicado su voto en contra de la ponencia debido a que, tal y como se ha configurado, puede convertirse en una “ponencia del proceso de blanqueo y apoyo de Bildu”. Barrio ha censurado como “patética” “escapista” y “teatralizada” la intervención de Mintegi. “Parece que algunos de ustedes están en sus intervenciones todavía bajo el control de ETA”, ha añadido en dirección a los abertzales.

Barrio ha afeado a peneuvistas y socialistas que en su “estéril voluntarismo, no sean exigentes” con EH Bildu, acusada de nuevo por los populares de negarse a condenar el terrorismo y sus crímenes y de no pedir la disolución de ETA.

El PP no ha aclarado si, pese a su rechazo inicial a la ponencia, después participará en sus trabajos, aunque su intención en estos momentos es no sumarse si no hay una clara reclamación a la izquierda abertzale de que condene a la banda terrorista.

UPyD, el único partido que ha descartado desde el principio tanto votar a favor de la ponencia como participación en sus trabajos, ha señalado que este grupo de trabajo “no tiene como objetivo ni la derrota de ETA ni la deslegitimación de la violencia, tiene como objetivo hablar de lo que interesa a la izquierda abertzale”. Su único parlamentario, Gorka Maneiro, ha acusado a los demás partidos de “asumir la agenda de ETA”.