BCNegra arranca con éxito
Los actos de la primera jornada registran un lleno total
La primera jornada de BCNegra mostró ayer su éxito de convocatoria. A las cuatro de la tarde la antigua Capella, en la calle Hospital, donde se celebra la mayor parte de actos, con un aforo para 400 personas, ya estaba casi llena. La mesa sobre el veneno, una de las armas preferidas de Agatha Christie, fue muy sugerente. Por ejemplo, la aparentemente inocua agua destilada bien, o mal, utilizada puede ser mortal sin dejar rastro.
Estas cosas no deberían aparecer en los diarios, porque dan ideas”, dijo Cristina Fernández Cubas, que estaba entre los asistentes.
El encuentro sobre la corrupción se tuvo que trasladar a un teatro porque desbordaba la capacidad de la Capella.
En el siguiente acto, sobre escritores debutantes en el género negro, ya no había sillas vacías. En el tercero, que reunió a los escritores Andreu Martín y Dolores Redondo y a la comisaria de los Mosso d’Esquadra Margarita Manresa, había gente de pie en los pasillos. El último encuentro del día, sobre la corrupción, en el que participó el periodista griego Kostas Vaxevanis, que fue a la cárcel por publicar la lista de presuntos evasores fiscales de su país, tuvo que ser trasladado al Barts (antiguo teatro Arteria), porque desbordaba la capacidad de la Capella.
El domingo ya se vio que la cosa iba bien. El Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) acogió por primera vez un acto del festival. Bajo el título No es oro todo lo que reluce, una mesa redonda congregó a más de 150 personas que abarrotaron la biblioteca del museo, para hablar de robos de arte y patrimonio, una actividad criminal considerada la tercera en beneficios, tras el tráfico de drogas y de armas y que genera unos 6.000 millones de dólares al año. Intervinieron tres especialistas en la materia: el arqueólogo Joan Carles Alay que recordó que las tumbas de los faraones ya fueron saqueadas en el antiguo Egipto y que el mayor problema es que los furtivos se llevan las piezas y destruyen toda la información del yacimiento. También el criminólogo Marc Balcells, que aseguró que estos robos suelen ser de piezas de valor incalculable y de difícil reconstrucción, mientras que la subcomisaria Llum Prados, que dirige la unidad del patrimonio artístico de los Mossos, aseguró que el patrimonio forma parte de la identidad de un pueblo y que el mayor anhelo de su unidad es, aparte de detener a los delincuentes, recuperar las piezas antes de que viajen a otros países. No es tarea fácil, ya que solo vuelven a sus vitrinas entre un 12 y un 14% de las piezas robadas.
El MNAC acogió una mesa redonda sobre robo de patrimonio con un criminólogo, un arqueólogo y una Mosso d'Esquadra
Un ejemplo digno de novela negra: en mayo de 1991 fue robada una joya única en el MNAC: el portapaz de Sigena, una obra del siglo XV excepcional. Han pasado más de dos décadas y los responsables del museo, y las fuerzas de seguridad la siguen buscando. Hay quien asegura que está en Italia, y que volverá a salir a la luz con el paso de los años. Es una de las 40.000 obras de arte que la Interpol tiene en su base de datos.
El francés Frantz Delplanque, el italiano Flavio Soriga y el catalán Lluís Llort abordan el género negro de manera poco convencional y renovadora. Los tres participaron ayer en la mesa redonda sobre los autores debutantes en el género negro. Delplanque, en Un gramo de odio, que inaugura la colección Alfaguara Negra, lo trata desde el punto de vista de un asesino profesional, Jon Ayaramendi, que se jubila en una pequeña localidad del País Vasco francés. Soriga, en Pluja negra (Crims.cat, Alrevés), retrata la presunta y aburrida cotidianidad de un pueblo de Cerdeña... hasta que muere una atractiva profesora y todo estalla. Es una lástima que no esté traducido al castellano, porque es estupenda. Crims.cat, que dirige Àlex Martín Escribà, se perfila cada vez más como la auténtica continuadora de la legendaria La Cua de Palla, solo que también incluye a autores catalanes.
Andreu Martín, Dolores Redondo y la comisaria de los Mossos Cristina Manresa, que de niña quería ser bailarina y que iba vestida de riguroso uniforme, encandilaron a los asistentes, todos buenos conocedores del género. El moderador, el periodista de TV-3 Toni Puntí calificó de de “novelas del año”, Crónica negra (RBA y en catalán, La Magrana), de Martín, y El guardián invisible, de Redondo, publicada simultáneamente en las cuatro lenguas oficiales (Destino, Columna, Erein y Xerais). Manresa, buena lectora, dijo que los comienzos de ambas novelas son “brutales e impactantes”. Luego, hablaron de ficción y realidad.
Paco Camarasa, comisario de BCNegra, rindió homenaje a nuestro compañero Agustí Fancelli, fallecido el sábado, y al escritor alemán Jakob Arjouni, que murió el 17 de enero, a los 48 años. Arjouni, creador del detective Kemal Kayankaya, publicó novelas tan interesantes como Happy birthday, turco.
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