La Masia Salat financia una rotonda en una carretera pública en Lleida

La iniciativa privada construirá en Les Borges Blanques (Garrigues) una rotonda para eliminar un punto peligroso de la carretera N-240, de titularidad pública. Los propietarios del restaurante Masia Salat, situado junto a esa vía, en un tramo de alta siniestralidad por el que circulan 11.000 vehículos diarios, no quieren que ningún cliente más muera intentando acceder a sus instalaciones.

El complejo Masia Salat, formado por un restaurante, un hotel, un parque temático del aceite, una gasolinera y una zona de ocio, es frecuentado cada día por una media de 1.240 clientes. Los hosteleros han decidido asumir totalmente el coste de la construcción de una rotonda de acceso desde la carretera N-240 porque el Ministerio de Fomento les ha comunicado que no tiene dinero para hacerla.

Francesc Riera, presidente del consejo de administración de Masia Salat, ha explicado que se está buscando los 200.000 euros que costará la rotonda y que la intención es tenerla acabada este mismo año. “Tenemos los permisos para poderla construir si la pagamos nosotros. No podemos esperar a que Fomento tenga dinero. La vida de una persona vale más que todo el dinero que nos pueda costar”, señala Riera.

El empresario hostelero considera totalmente justificada la inversión que se tendrá que realizar para garantizar la seguridad de los conductores que accedan al complejo. “Estamos convencidos de que hacemos un bien a la sociedad, a los clientes y a nuestro negocio”.

Riera asegura que todavía está impactado por la muerte de un matrimonio hace tres años en un lugar en el que anteriormente se habían registrado otros accidentes mortales. “Me quedé desolado y casi me da un infarto. Me sentí impotente y como no quiero que aquella situación se vuelva a repetir, la rotonda se hará cueste lo que cueste”.

Desde Lleida los vehículos pueden acceder de forma directa al complejo Masia Salat, pero los que circulan en el otro sentido se ven obligados a cruzar la vía. Esta maniobra resulta muy peligrosa, principalmente los días de poca visibilidad a causa de la niebla. Tras el último accidente mortal, Fomento prohibió los giros a la izquierda, lo que obliga a los conductores a retroceder hasta Les Borges Blancas para cambiar de sentido. Desde entonces no se han registrado víctimas en ese punto.

La subdelegada del Gobierno central en Lleida, Inma Manso, ha confirmado que el Ministerio de Fomento se encargará del proyecto técnico de la futura rotonda de acceso a la Masia Salat. “Lo que no podemos hacer es pagar una obra que sólo beneficia a un particular”.

El tramo de la carretera N-240 entre Juneda y Les Borges Blanques, de unos siete kilómetros, es uno de los de mayor siniestralidad de la red viaria de la provincia de Lleida, donde en los últimos cuatro años han muerto 14 personas. Desde 2008, Fomento tiene proyectadas cuatro rotondas pero de momento están pendientes por falta de presupuesto.