Carta a los niños

Queridos niños: por fin acaba este año tan largo, y tan raro, y seguramente estaréis ya hartos de escuchar sermones por la tele sobre lo malos que habéis sido, y lo mal que se han portado vuestros papás gastándose, así como al tuntún, lo que no tenían, para llevar una vida llena de caprichos y desenfreno sin medida. Y, por si esto fuera poco, este año los Reyes Magos tienen toda la pinta de mostrase poco generosos con vosotros, una vez el Papa de Roma ha decretado que su origen es andaluz, lo que significa que son mucho más pobres de lo que pensabais, y que además, vienen de Occidente, en lugar de Oriente, que es de dónde venían antes cuando eran muy ricos. No es extraño, pues, que estéis un poco tristes y sin muchas ganas de celebrar unas fiestas tan entrañables como éstas, en compañía de vuestros papás y vuestros hermanitos mayores, muy probablemente, en el paro.

Pero tengo que deciros que las cosas no son tan malas como parece. En 2012 habéis conocido un montón de amiguitos nuevos que antes no sabíais ni que existieran; todos muy simpáticos y que quieren ayudarnos mucho. Porque tenéis que saber que antes de que ellos vinieran a mandar en España, había un hombre muy malo y muy perverso, llamado Zapatero, que dejó todo fatal, y, sobre todo, muy desordenado; más o menos como queda vuestra habitación antes de salir por las mañanas para ir el colegio.

Por ejemplo, hay un señor que se llama Mariano, que lleva una barba de un color muy diferente al del pelo, pero que está sufriendo mucho para sacarnos a todos adelante; y una señora alemana de nombre Angela que nos castiga todo el tiempo por nuestro bien, y a la que, aunque ahora no lo entendáis, debemos estarle siempre muy agradecidos. Está también, el amiguito Cristóbal que ahora se ocupa de nuestro dinero para que no lo malgastemos. Y Luis que es muy listo y saca siempre notas muy altas en mates, y Fátima brotes verdes como le llaman en el cole los otros niños. Y María Dolores que es muy simpática; y Esperanza y Alberto que son muy amables siempre con todo el mundo. Por no hablar de unos señores que se llaman banqueros y que, aunque parecen muy serios, así a primera vista, están todo el día haciendo gracias con nuestro dinero y contando chistes sobre hipotecas para que nos riamos. Y así, muchos más.

Algunas tardes, incluso, habréis visto que viene a jugar con nosotros el tito José María que lleva bigote y que es muy respetado por todos, porque cuando él mandaba España iba muy bien, hasta que llegó Zapatero, del que ya os he hablado, y que, aunque nos regaña a menudo, es una persona entrañable que siempre va por el mundo hablando bien de nosotros y sacrificándose por todos.

O sea, que aunque ahora no lo veáis, hay mucha gente preocupándose de vosotros para que 2013 sea un año mucho mejor que éste que acabamos de pasar, y quiero que tengáis la seguridad de que, gracias a ellos, vais a ser mucho; pero que mucho, mucho, mucho, más felices. Besitos a todos, y ¡feliz año nuevo!