La Eurorregión pide prioridad para el corredor mediterráneo

El corredor ferroviario del Mediterráneo, que debe servir para conectar los principales puertos españoles con Europa, lleva camino de convertirse en un proyecto inacabable por la escasa dotación presupuestaria de la obra. La infraestructura, que el mundo económico juzga imprescindible, recibió este lunes un empuje político con una declaración conjunta de los cuatro miembros de la Eurorregión Pirineos-Mediterráneo: Cataluña, Baleares, Languedoc-Rosellón y Midi-Pyrénées.

Este organismo se reunió en Barcelona para hacer el cambio de presidencia, que este año ha recaído en el presidente catalán, Artur Mas, y a partir de ahora estará bajo responsabilidad de Martin Malvy, presidente de Midi-Pyrénées. Al acto protocolario también asistieron el presidente de Baleares, José Ramón Bauzá, y el vicepresidente de Languedoc-Rosellón, Jean-Claude Gayssot. Todos apostaron por el eje ferroviario de mercancías en línea con las aspiraciones de la Eurorregión, que busca impulsar la cooperación económica y social entre las cuatro regiones.

La declaración firmada este lunes reclama “con urgencia” a los Gobiernos de Francia y España y a las autoridades comunitarias que elaboren un calendario para desarrollar el corredor del Mediterráneo, de manera que se fijen “las prioridades de inversión y se asuma el compromiso de terminar el proyecto antes de 2030”. También se aboga por que la línea de gran velocidad francesa Montpellier-Narbonne-Toulouse-Burdeos sea reconocida de manera integral en el eje prioritario y quede conectada con el corredor mediterráneo. La conexión de los puertos de Barcelona, Tarragona, Palma de Mallorca y Sète es otra de sus reivindicaciones.