Montoro rehace el presupuesto del Consell
El Ministerio de Hacienda supervisa la redacción de las cuentas de la Generalitat de 2013
El Consell apura el plazo legal para aprobar los Presupuestos de la Generalitat para el año 2013 que, en condiciones normales, tendrían que darse a conocer en el pleno de hoy. Sin embargo, el Gobierno valenciano no los hará públicos hasta el próximo martes tras la celebración de un pleno extraordinario. La versión oficial apunta que las cuentas “están prácticamente cerradas. Mañana mismo se podrían aprobar”. Y esto es así, pero con un matiz nada desdeñable, el Ministerio de Economía está interviniendo directamente en la redacción del presupuesto. De hecho, el consejero de Hacienda, José Manuel Vela, ha realizado durante estos días pasados varias visitas a la sede del ministerio en Madrid para ajustar las cuentas de acuerdo con las exigencias de Cristóbal Montoro.
El ministro de Hacienda convocó en Madrid el pasado día 26 al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, para hacerle saber el malestar del Gobierno ante la falta de concreción de las medidas de ajuste del Consell y pedirle que espabilara.
Unas medidas que están en el plan de reequilibrio financiero, presentado por el Consell el pasado mes de abril para poder acceder al plan de proveedores articulado por el Gobierno, y que todavía están en barbecho.
El presidente dice que la condición del FLA es cumplir con el déficit
El nuevo modelo de gestión del sistema sanitario, que tenía que aportar 360 millones de euros este mismo año, ha fracasado. La venta de inmuebles de la Generalitat, por la que se tenían que recaudar 140 millones de euros antes de finalizar 2012 no se ha puesto en marcha. El plan de reestructuración del sector público de la Generalitat, que afectará a 3.000 empleados públicos, va con meses de retraso. Y el expediente de regulación de empleo de Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), está aprobado pero pendiente de ejecución.
El Gobierno valenciano ha logrado compensar parte de los ajustes no realizados con la supresión de la paga extra a los funcionarios, el medicamentazo —que ha rebajado la factura farmacéutica— y la reducción del absentismo laboral. Aunque todas estas medidas no han sido a iniciativa del Consell, sino del Gobierno de Mariano Rajoy.
Fuentes del PP nacional coincidieron al explicar que durante la reunión Montoro comunicó a Fabra que la Comunidad Valenciana no estaba cumpliendo el objetivo de déficit, ni ninguna de las medidas de ahorro que lleva meses anunciando. El ministro de Hacienda, según una de estas fuentes comunicó al presidente de la Generalitat que “Valencia no estaba haciendo las cosas bien” porque lleva “un montón de tiempo anunciando que va a tomar medidas y no se ha hecho nada”. “Llevan meses diciendo: vamos a hacer, vamos a hacer; pero no han hecho nada”, indicó la misma fuente.
Una de los mensajes más claros que Montoro trasladó a Fabra fue que no tolera ya “que no haga lo que dice que va a hacer”. “Si anuncia la privatización de las empresas públicas, que lo haga. No puede perder más tiempo”.
El ministro exige a Fabra que espabile y reestructure ya el sector público
El exhaustivo control que está llevando Montoro de las cuentas de la Generalitat —una intervención en toda regla, según algunas fuentes— está poniendo de manifiesta la falta de autonomía del Consell y su escaso peso político en el Gobierno, toda vez que parece claro que no se van a aceptar ninguna de las enmiendas que el presidente Fabra —prometió que mejoraría la inversión del Estado en 144 millones— ha pedido que se introdujeran en los Presupuestos Generales del Estado. El Congreso cierra hoy el plazo para presentar enmiendas parciales a la ley de Presupuestos y contra la implantación de una nueva tasa al gas que grava a la industria cerámica de Castellón. Ambas iniciativas parecen condenadas al fracaso.
Pese a este desdén gubernamental, fuentes del Consell, se muestran convencidas del déficit previsto para la Comunidad Valenciana podría situarse alrededor del 1,2% o 1,3% déficit, en el tercer trimestre, lo que dejaría un estrecho margen de dos o tres décimas para cumplir el objetivo del 1,5% para final de año. Una situación, al filo de la navaja, que la Comunidad Valenciana comparte con otras autonomías.
En este contexto, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, anunció este jueves en la sesión de control de las Cortes Valencianas que la semana que viene recibirán 750 millones de euros del primer pago del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) “para atender las necesidades de la Comunidad Valenciana”. “La única condición del FLA es el cumplimiento del déficit”, dijo Fabra para rebatir las críticas del socialista Antonio Torres, “y le puedo garantizar que a finales de año estaremos por debajo del [1,5%] déficit”.
La mitad del primer pago del rescate, para el Estado
El primer pago del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) que recibirá el Consell está ya repartido. El Gobierno valenciano tiene muy poco margen y ha decidido utilizar el dinero para pagar parte de la deuda con colectivos que se hallan en situación límite, como los colectivos de personas dependientes, o que tiene una gran capacidad de presión, como los farmacéuticos.
Sin embargo, los recursos son muy limitados. De los 750 millones de euros, la mitad ni siquiera llegará a desembolsar. El Gobierno se quedará con los 380 millones de euros que le adeuda la Generalitat en materia de cotizaciones de la seguridad social, retenciones del IRPF y otros conceptos.
Un total de 35,9 millones de euros irán a pagar los intereses de la deuda de la Generalitat.
Otros 118 millones serán para pagar a las farmacias una de las cuatro mensualidades pendientes. Las universidades recibirán otros 64 millones para afrontar sus gastos de funcionamiento y la Consejería de Sanidad dispondrá de 1,9 millones para atender parte de las deudas más urgentes.
Tras realizarse este reparto, el Consell dispondrá de 124 millones de euros para pagar gastos fijos. Con este primer pago del fondo de rescate, la Consejería de Bienestar Social dispondrá de 18 millones de euros para afrontar las necesidades más urgentes de la ley de Dependencia y atender la deuda con los colectivos más desfavorecidos.
Según fuentes de la Generalitat, la previsión es que antes de acabar 2012 se puedan realizar otras dos tandas de pagos por importe de 47 y 50 millones de euros respectivamente. Cantidades que saldrán de los otros dos plazos que, previsiblemente, autorizará el Gobierno a través del FLA en los meses de noviembre y diciembre.
La Consejería de Educación y Empleo también dispondrá de 33 millones de euros del primer pago del fondo de rescate para atender deudas urgentes. Aunque no se ha especificado gran cosa, se da por seguro que las empresas de transporte escolar o los centros sociales de empleo recibirán parte del dinero adeudado.
Para los ayuntamientos que se hallan en situación más desesperada, también habrá una primera remesa de 23 millones de euros con la que aliviar la deuda de la Generalitat.
Correos también será otro de los beneficiarios del fondo de rescate, ya que el Consell prevé pagar 10 millones de euros de la deuda que mantiene con la empresa postal. Para los registradores, la cantidad reservada es de 14 millones de euros y para los colegios de abogados, que prestan el turno de oficio, se destinarán 700.000 euros con los que reducir la cuenta. El dinero restante irá a otra clase de pagos como los seguros agrarios.
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