Los agentes señalan a Garrigues por el desvío de fondos públicos

La Guardia Civil censura con dureza el papel del prestigioso bufete Garrigues, al que otorga un papel decisivo en el sistema creado, y que tramitó numerosos ERE para las empresas y la Junta. “Se infiere que desde Garrigues se habría participado en el diseño del método de desvío de fondos con total conocimiento de su irregularidad”. Los agentes prevén investigar 117 cuentas corrientes del despacho por los pagos “que hubiera propiciado el enriquecimiento ilícito de determinados letrados del mismo”. Dos de ellos ya están imputados en la causa judicial.

Garrigues ha sido la firma de abogados de referencia de la Junta durante más de una década, y por ello ha cobrado minutas con muchos ceros por asesorar firmas como Santana Motor.

Mientras, los agentes señalan a la empresaria imputada Encarnación Poto, exresponsable de la firma de aceitunas Acyco. Poto recibió en su cuenta personal una transferencia de 82.215 euros. “El ingreso del dinero permitió a Poto destinar la ayuda a una finalidad distinta para la que fue concedida”. Es decir, el pago de la minuta de Garrigues por haber tramitado el ERE de la empresa. La Guardia Civil le acusa de haber ocultado al resto de accionistas de Acyco, entre los que estaba el mayoritario Deoleo, la ayuda de la Junta y la deuda con el bufete Garrigues.