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“El PNV defiende a los defraudadores”

“Los socialistas gestionamos mejor que el PNV en los tiempos de crisis”

Patxi López, en una de las dependencias de 'Lehendakaritza', en Vitoria.
Patxi López, en una de las dependencias de 'Lehendakaritza', en Vitoria.L. RICO

Llega sonriente a su despacho de lehendakari, satisfecho por un encuentro con jóvenes en Vitoria. Mantiene la esperanza de que su gestión será revalidada.

Pregunta. ¿Tiene la sensación de que se acaba su tiempo?

Respuesta. No. Tengo la convicción de que la sociedad vasca va a entender lo que ha significado el Gobierno socialista, de abrir un nuevo tiempo, de haber traído tranquilidad y normalidad en lugar de bronca y confrontación, que hemos dado respuesta a la crisis sin aplicar recortes, manteniendo los derechos, abriendo el tiempo de la libertad y que se va a valorar.

P. ¿Ha aprovechado la oportunidad de ser alternativa al PNV?

Los socialistas gestionamos mejor que el PNV en los tiempos de crisis”

R. Hemos derribado ese mito de que solo el PNV podía gobernar este país. Los socialistas gestionamos mejor en tiempos más difíciles. Si comparamos esta y otras crisis, dato por dato, se desmonta que el PNV sea buen gestor y afianza el valor de la gestión del gobierno socialista.

P. ¿Tiene la sensación de que este es un país o un territorio de y para nacionalistas?

R. No. No me resigno a eso. En muchas ocasiones la política se ha reducido al debate identitario, pero nosotros hemos puesto las prioridades de la política donde están las preocupaciones de la gente. Algunos quieren volver a ese tiempo, pero la ciudadanía acabará entendiendo que hay que estar a lo que hay que estar y no desviarnos.

El PNV va a ser el prisionero de Bildu como ya lo es ahora en Gipuzkoa”

P. Ante tanta crítica desde la oposición, ¿ha llegado a sentirse deslegitimado?

R. Lo han intentado desde el primer momento. No me olvido que dijeron que era un gobierno ilegítimo. Han intentado que gobernáramos con una mano atada a la espalda, por ejemplo, la de los ingresos que es fundamental en época de crisis. Somos el único gobierno de Europa que no tiene capacidad para hacerlo, y el PNV y, aliado con el PP en muchas ocasiones, lo han impedido.

P. ¿Le ha lastrado el acuerdo con el PP?

R. No. El acuerdo ha permitido hacer muchas cosas en este país. Los objetivos del acuerdo los sigo compartiendo: luchar contra el terrorismo para conseguir la paz y la libertad, dejar los debates identitarios, defender el autogobierno, los servicios sociales. Nos ha permitido la alternativa para que no volviera a haber un gobierno de Ibarretxe enfrentándonos a los vascos.

P. ¿Se arrepiente no haber estado en Euskadi el día del fin de ETA?

R. No. Mucha gente quiere utilizar esto como una crítica. Yo sabía lo que había y estaba en EE UU defendiendo a Euskadi donde tocaba defender, al frente de una delegación empresarial. La conferencia de Aiete no nos ha traído la paz. La paz la han traído 30 años de lucha contra el terrorismo, la eficacia de las policías y la contundencia de la justicia y la dignidad de las víctimas, y la resistencia de una sociedad que puso pie en pared.

P. ¿Va a ser posible la convivencia tras escuchar a EH Bildu hablar de dos relatos y de unir la cifra de todas las víctimas?

R. El relato no es más que uno que es el real. Me niego a que quienes han apoyado a una banda terrorista porque le aplaudían el asesinato y les daban cobertura política aparezcan ahora como triunfadores y valedores de la paz.

P. ¿Deja un gobierno endeudado, sin capacidad de maniobra?

R. Dejo y espero seguir en un Gobierno que es el más solvente de todos los que existen en España, el que mejor está cumpliendo el objetivo del déficit, que no tiene ni una sola factura en el cajón y que en época de crisis, se ha endeudado la mitad de lo que se endeudaron otros gobiernos vascos en época de crisis. El año que viene vamos a dedicarle 4% del presupuesto a la deuda y a los intereses, en otras épocas y con gobiernos del PNV dedicábamos 7,5 % y hasta el 9,5 %.

P. Se opone a los recortes, es su bandera política, ¿pero es posible no aplicarlos?

R. Sí, es posible, si recortamos el fraude fiscal y la evasión fiscal. Hay que hablar de los ingresos yeso se consigue con una reforma fiscal en profundidad.

P. ¿Por qué encuentra al PNV tan reticente en ese tema?

R. Porque quiere mantener los privilegios de alguno. Cuando hablo de perseguir el fraude y me dicen que no, supongo que defienden a los defraudadores o quieren que paguen más los trabajadores. Si cuando yo digo repartamos mejor las cargas y quien cobra más de 120.000 euros tenga un 60% durante la crisis o un impuesto de solidaridad especial para los de patrimonio mayor a millón y medio, y me dice que no y dice que sí quiere hacer una reforma fiscal, está diciendo que paguen más los que ya pagan. Han vivido muy cómodos en este país, haciendo las reformas fiscales en sus despachos, en Sabin Etxea. ¿Alguien sabe algo de la reforma fiscal del diputado general de Bizkaia para final de año? La está haciendo con nocturnidad y alevosía, yo quiero con luz y taquígrafos en el Parlamento.

P. ¿Se van a entender las fuerzas de izquierda?

R. No lo sé. Yo estoy dispuesto a entenderme con cualquiera que quiera hacer un país, aparte de moderno, nacional, pero no solo en la fiscalidad. No tenemos que tenerlo todo por triplicado en las instituciones.

P. ¿Ve un entendimiento PSE-EE y Bildu si suman mayoría?

R. No. Eso ya lo he dicho. Con Bildu nos separa un abismo ético. Aún son incapaces de hacer un recorrido ni siquiera democrático, ético. Y luego la demostración de cómo es la gestión de Bildu es Gipuzkoa, que está paralizada por su gobierno foral. En Gipuzkoa todo lo que se mueve es gracias al gobierno socialista.

P. ¿Y aun así pueden ser segunda fuerza?

R. Espero que no, creo que no. Me parecería injusto que hubiera quien les premiara como si fueran los conseguidores de la paz cuando son los mantenedores de la violencia.

P. ¿Urkullu acabará pidiendo la independencia esta legislatura?

R. Es más que probable que el PNV que quiera aparecer en estas elecciones como el freno de Bildu, sea el prisionero de Bildu y, de hecho, lo está siendo, en Gipuzkoa donde les ha entregado el gobierno porque no quiere ni oír de hablar de una moción de censura. Bildu arrastra al PNV cada vez que habla de independencia. Me gustaría que lo dijera claramente, y no con eufemismos. El derecho a decidir lo engloba todo, pues que lo diga, yo estaré en contra, porque fractura a la sociedad y no arregla ninguno de nuestros problemas.

P. ¿Qué le dicen los empresarios vascos sobre la posibilidad de la independencia?

R. Los empresarios vascos saben perfectamente, como saben los empresarios de Cataluña, que la independencia sería radicalmente contraria a sus intereses. Que no podríamos pagar las pensiones, con 900 millones de déficit y lo único que garantiza las pensiones es la caja única de la Seguridad Social y la solidaridad del resto de los españoles. La independencia, con la excusa de separarnos de España, nos saca de Europa, tendría que empezar a pagar aranceles, y, por cierto, el IVA ¿dónde se paga cuando uno se independiza, allí, verdad? Entonces, ¿qué recaudaríamos nosotros, si somos un país exportador? Que no nos vengan ya con cuentos de este tipo que sabemos hacer sumas...

P. ¿Hasta dónde irá Mas?

R. No lo sé, pero me preocupan mucho dos cosas. Una, que no hayamos o que no hayan sabido algunos utilizar la política cuando se empieza con una reivindicación de mejorar una financiación que es injusta, y que creo que sí que lo es. Y que quien podía haber pasado a la historia como el campeón de la recesión y de los recortes, porque es el que más se recorta de toda España, pueda acabar pasando como el campeón de la secesión y de la independencia, pero al que hay que recordar que la democracia no es solo juego de mayorías sino que hay una ley que cumplir.

P. ¿Y el PSC?

R. Creo que tiene un espacio enorme y tiene que saber ocuparlo entre la independencia y el centralismo del PP.

P. Sin mayorías claras y en crisis, ¿contempla entenderse con el PNV?

R. Este país necesita entendimiento siempre. Hay asuntos de país en los que hay que entenderse, pero eso no implica ni gobiernos de coalición, ni apoyos concretos, sino que esté uno en el gobierno o en la oposición, entender que tiene una responsabilidad y que la ejerce. El PSE ya dio ejemplo de eso con el Gobierno Ibarretxe.

P. Si no gobierna, ¿se va a Madrid?

R. Aspiro a ganar y mi objetivo, mi prioridad, mi vida está aquí.

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