Barberá gasta 5.600 euros en la cena de una asociación de discapacitados

El Gobierno local de Rita Barberá se ha gastado cerca de 6.000 euros del presupuesto municipal en subvencionar un ágape a una asociación de discapacitados. El gasto se aprobó en la pasada junta de gobierno, solo tres meses después de que el Consistorio solicitara un préstamo de 181 millones de euros para pagar facturas en los cajones a decenas de proveedores.

Las cuentas municipales de Valencia se recortaron este año y volverán a ajustarse en 2013. El Consistorio cerró además 2011 con 8,9 millones de euros pendientes de pago de prestaciones sociales y comenzó 2012 con las protestas de los empleados de servicios sociales por los impagos del Ayuntamiento.

En un contexto de recortes, ajustes e impagos como este, el Gobierno de Rita Barberá acaba de aprobar una subvención de 5.600 euros para una comida organizada por la Asociación de Lesionados Medulares y Grandes Minusválidos Físicos de la Comunidad Valenciana (Aspaym) en un conocido local de la playa de Valencia, en el restaurante L’Estimat. La cena fue a finales de junio durante un congreso y se ha justificado con una factura del restaurante donde aparecen 140 comensales a 40 euros el menú. El ágape costó 5.600 euros y los 400 euros restantes hasta los 6.000 de la subvención se han justificado como gastos de imprenta, según aparece en el expediente municipal.

El evento se produjo durante el XXXII Congreso de Información para Lesionados Medulares que duró dos días a finales de junio. La asociación celebraba además su 30º aniversario. “Es para nosotros muy importante la celebración de este tipo de evento, ya que además de informar a los lesionados medulares conseguimos confraternizar mediante la cena aludida”, dice la asociación en su solicitud al Consistorio. Aspaym solicitó la subvención el pasado febrero “para sufragar los gastos de organización de su 32º congreso”. Casi el 100% de la subvención se fue en la cena.

Ana Albert, concejal de Bienestar Social, asistió a la inauguración el pasado lunes de la sede de Aspaym, en Benimaclet, tres días después de que la Junta de Gobierno local diese el visto bueno a la subvención. Este diario preguntó por la subvención al Consistorio pero este no respondió.

La concejal socialista Anaïs Menguzzato lamentó “la arbitrariedad de Rita Barberá a la hora de repartir las subvenciones”. Solo la alcaldía cuenta en 2012 con una partida de 148.000 euros para repartir ayudas. El último informe de auditoría de gastos del Ayuntamiento de Valencia detectó en 2011 reparo en el gasto en subvenciones municipales. “El Ayuntamiento sigue sin aprobar un plan estratégico de subvenciones como exige la ley de 2003, donde el Gobierno local concrete objetivos”, denuncia Menguzzato.

La auditoría aconseja gestionar las ayudas de Bienestar Social mediante convenios en lugar de subvenciones porque permite hacer un seguimiento de los objetivos y los logros. “Pero no se hace ni caso desde la Concejalía de Bienestar Social”, agrega la edil.

Pese al aumento de personas con necesidad de ayuda económica a causa de la crisis —la propia alcaldesa lo ha reconocido en infinidad de ocasiones—, el presupuesto de la Concejalía de Bienestar Social tiene un grado de ejecución relativamente bajo. A 1 de septiembre, de los 28,74 millones de euros de presupuesto, solo se habían abonado 9,3 millones, lo que representa un 32% del total. Los pagos pendientes de otros años suman a 40.829 euros y corresponden casi todo a proyectos de cooperación.

La situación no mejorará en 2013, a la vista del recién presentado proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE), que recortan el 40% de la partida de servicios sociales a los Ayuntamientos.