La defensa pide la libertad provisional para el celador de Olot

La defensa del celador de Olot ha solicitado la libertad provisional para Joan Vila Dilmé, que en octubre cumplirá dos años de prisión provisional, al considerar que no existe peligro de huida. El juicio contra Vila, quien confesó haber asesinado a 11 ancianos en la residencia geriátrica La Caritat entre agosto de 2009 y octubre de 2010, se prevé para principios de 2013. El fiscal y las acusaciones particulares han solicitado ante el juzgado de Olot que se prorrogue su prisión provisional. Algunos de los familiares de las víctimas son vecinos de Castellfollit de la Roca, el pueblo gerundense donde vivía el celador.

La acusación particular reclama un total de 202 años de prisión para Vila y la prohibición de acercarse a menos de 100 kilómetros de Olot y Castellfollit, mientras que el fiscal pide una pena de 194 años de cárcel. "Pido libertad provisional porque la ley prevé prórroga solo en caso de peligro de huida, independientemente de la gravedad de los hechos, y mi cliente no huirá", ha expuesto el abogado defensor, Carles Monguilod, antes de su entrada a los juzgados de Olot, donde se ha celebrado una audiencia preliminar antes de cerrar la instrucción del caso del celador de Olot. "Permitir que no pueda acercarse a menos de 100 kilómetros de aquí sería como desterrarlo o desarraigarlo", ha dicho. Vila ha declarado que no piensa huir y que “no lo ha pensado nunca”, según Monguilod.

A Vila le “horroriza” pensar en los asesinatos que ha cometido, según su abogado. "No sabe convencerse a él mismo de que los hechos penales tienen esta trascendencia", ha manifestado Monguilod. El celador mantiene la misma actitud desde su detención: “Le da la sensación de que se habla de otra persona y no tiene la percepción de que lo que hacía era asesinar”.

La juez ha fijado una fianza de 710.000 euros para Joan Vila, una cantidad un tercio mayor que la solicitada por el fiscal del caso, para cubrir las indemnizaciones que se fijen durante el juicio. El celador carece de medios para hacer frente a ese montante. En caso de que el juzgado determine que Vila es insolvente, será la fundación que gestiona el geriátrico La Caritat y en su caso la aseguradora, Zurich Insurance, con la que esta tiene suscrita la póliza de responsabilidad civil, las que deberán hacer frente a las indemnizaciones.