La semana por delante
Concierto de solidaridad con las Pussy Riot, una obra de Shakespeare o una muestra sobre mujeres en la conquista de América, entre la oferta cultural de la semana
POP. La ola de solidaridad internacional por la condena a dos años de cárcel contra tres de las componentes del colectivo punk ruso Pussy Riot llega a Madrid en forma de conciertos. Varias organizaciones vinculadas con la música y el feminismo (Ladyfest, la promotora de conciertos Explosión Musical, la revista feminista-queer Una Buena Barba o la Fundación Robo) han organizado una fiesta con precio libre, en la Sala Siroco para el viernes 7 de septiembre. El objetivo es rendirles tributo y recaudar fondos para ayudar a las detenidas y las dos compañeras prófugas que lograron eludir la condena huyendo de Rusia. Participarán Las Jennys de Arroyoculebro, Fundación Robo, Gruppo Paralelo, Las Sexpeares y se anuncian “muchas sorpresas”.—ÍÑIGO LÓPEZ PALACIOS
ARTE. Al principio, en la conquista de América solo participaron hombres. Pero a medida que estos acababan formando una segunda familia en las tierras conquistadas, empezaron a mandarlos con sus esposas.
No fueron estas las únicas en ir a las Américas. Acompañando a Colón en su tercer viaje fueron 30 mujeres cuyos nombres son pocos los que hoy los conocen. Y, sin embargo, ahí está María Escobar, que fue quien introdujo el trigo en América. O Catalina de Erauso, que dejó el convento para acabar de soldado en los reinos de Perú y Chile. En todo caso, las protagonistas femeninas han sido las grandes olvidadas de este importante pasaje de nuestra historia.
Ahora, la exposición No fueron solos. Mujeres en la conquista y colonización de América, en el Museo Naval (paseo del Prado, 5) hasta el 30 de septiembre, trata por primera vez de recuperar la voz de estas mujeres que fueron decisivas en el proceso de consolidación cultural.— MARÍA JOSÉ DÍAZ DE TUESTA
CINE. ¿De qué está hecho el halcón maltés? Sam Spade tiene la respuesta, y en realidad, esta dichosa estatua está compuesta del mismo material que el cine. Tanto si lo saben como si no, el Círculo de Bellas Artes proyecta el jueves a las 17.00 en su cine, dentro del ciclo dedicado a John Huston, su adaptación de la novela de Dashiel Hammett, que está llevada a la pantalla palabra a palabra y secuencia a secuencia, con una fidelidad que prueba la fuerza del libro y la sabia cautela de Huston en su debut en la dirección. Bogart como Bogart, Mary Astor fulminante, un blanco y negro como se merece una historia así, y la grandeza de una ciudad como San Francisco: El halcón maltés es un clásico con aroma.—GREGORIO BELINCHÓN
CLÁSICA. Muchos de los compositores más vanguardistas del siglo XX sintieron esa llamada mística de necesitar una creencia, una fe. Arnold Schönberg no iba a ser menos. El padre del dodecafonismo se embarcó en un proyecto de dimensiones bíblicas —literalmente— con Moisés y Aarón. Ópera transgresora y compleja, la historia de los hombres que sacaron al pueblo de Israel de Egipto se convierte en un monumental despliegue de sonoridades con regustos arcaizantes. Como conmemoración de los 15 años de la reapertura del Teatro Real, la única ópera del alemán con Sylvain Cambreling en la dirección musical para el viernes y el domingo que viene. Buen momento para acercarse a ese “universo Mortier”, una programación arriesgada con tintes de desafío. Eso sí, será en versión concierto, no esperen una visión moderna de las canteras de las pirámides ni la esfinge dibujada en el horizonte. Solo música y la devoción de un judío que no admitía concesiones.—MIGUEL PÉREZ MARTÍN
TEATRO. La compañía Rakatá, caracterizada desde que nació en 2003 por acometer montajes llenos de riesgo y especializarse en el teatro del Siglo de Oro, ha abordado este año su proyecto más ambicioso: montar Enrique VIII, la obra menos representada de Shakespeare con la que han participado, y con éxito, en las Olimpiadas Culturales de Londres 2012, en el Shakespeare Globe Theatre, donde se exhibieron las 36 obras del bardo, en 36 idiomas y por 36 compañías de todo el mundo.
Ahora este montaje se representa en Los Teatros del Canal, donde el director Ernesto Arias (vinculado a la compañía desde sus orígenes) ha puesto en pie con 14 actores esta historia del más representativo rey de la dinastía Tudor, interpretado por Fernando Gil, en su relación con la corte española y Catalina de Aragón, que aborda la actriz Elena González, quien está acaparando grandes elogios de la crítica especializada.— ROSANA TORRES
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