Verbenas autogestionadas

El barrio de Lavapiés está de fiesta. Al salir de la parada de metro, una humareda nubla la vista. Es el humo que desprenden las barbacoas cargadas de salchichas y morcillas, todo un clásico de los festejos de barrio. Suena reggaeton, y de fondo la voz de un feriante que pide un euro para el “gran sorteo”. Transistores, banderas de España, peluches… normalidad absoluta. A unos metros, una puerta metálica en medio de un extenso muro de hormigón llama la atención de los vecinos. Junto a varias guirnaldas multicolor cuelga un cartel: Espacio liberado por la asamblea de Lavapiés. “¿Entramos?”, dice ya con un pie dentro del recinto una veinteañera a su acompañante. “Vale, nos quedamos”, se escucha a continuación.

Todavía no lo saben, pero están dentro de un espacio “liberado” por el movimiento 15-M para su celebración alternativa de las fiestas del barrio. “No nos gusta hablar de okupación, nosotros habilitamos espacios abandonados para darles vida”, cuenta Aurora, miembro de la asamblea popular del barrio. El solar, propiedad de la Administración, estaba destinado a la construcción de una comisaría de policía. “Esta noche este terreno va a vibrar”, cuenta otro de los integrantes de la asamblea.

La programación tiene un toque alternativo. La pieza estrella es el karaoke indignado. Canciones como Sin mi vivienda o La chica del PP son las más solicitadas. “Hemos adaptado temas clásicos que todo el mundo conoce y hemos introducido letras interesantes y emblemáticas del 15-M”, explica Aurora. En el primero de los casos, la lírica de My way de Frank Sinatra se ha sustituido por estribillos como “jamás pensé que pudiera ser un desahuciado”. “Esta es de mis favoritas, me pone los pelos de punta. Hemos acompañado los textos con fotografías de desahucios paralizados por el 15-M y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca”, continúa Aurora mientras saca de su mochila un folio con las letras impresas. En una de las paredes del solar, una gran lona blanca capta las imágenes del proyector.

El espacio es amplio, muy amplio. En uno de los rincones se puede encontrar desde grandes clásicos del cine en DVD hasta collares de coco o jerséis de lana con estampados aztecas. Es un mercadillo de trueque. Y ¿comprar bebida? “Tienes que traerla de casa; nosotros ponemos la nevera”.

Actividades. Hoy: 18.00. Primera Feria del Libro de Lavapiés. Mañana: 22.00. Proyección de Sans soleil, de Chris Marker. Lugar: solar de la calle de Valencia.