San Sebastián perfila un nuevo modelo para su Semana Grande

San Sebastián busca modelo festivo. No se trata de ponerlo todo patas arriba, ni mucho menos de replantearse los ejes centrales del programa de la Semana Grande, pero sí “dar oportunidad a todo aquel que quiera participar a poder hacerlo”, explica la concejal de Cultura, Nerea Txapartegi. Y por participar se entiende proponer algún proyecto o actividad. Cuando el recién nombrado equipo de Gobierno de Bildu anunció el año pasado que buscaban unas fiestas “más participativas” la polémica se desató. ¿Cómo?, era la principal pregunta que plantearon los partidos de la oposición.

Ese camino que ha abierto San Sebastián, todavía por recorrer, afinar y terminar de diseñar, como precisa la concejal, se inició el pasado mes de marzo con una convocatoria. “Las diferentes asociaciones de San Sebastián participaron en una reunión, en la que pudieron plantear sus aportaciones”, añade. Fue el primer paso. Tal vez modesto, pero se supone el embrión de algo que irá a mayores.

De las 351 actividades que conforman el programa de la Semana Grande algunas se gestaron en aquel encuentro. Entre ellas, las propuestas por el colectivo Urban 13, dedicados a la cultura urbana y que ofrecerá el miércoles 15, a las 13.30, en las terrazas del Kursaal una actividad relacionada con el hip-hop. “Trabajan con la música, la danza, el dibujo, el graffiti y nos plantearon que quizás hiciera falta alguna actividad más para los jóvenes”, ejemplifica Txapartegi. También de aquella reunión salió una sardinada popular en Amara Viejo, un acto de homenaje al centenario del Teatro Victoria Eugenia por parte de la comparsa Itzurun, la de los gigantes y cabezudos, y, sobre todo, la extensión de la fiesta a los barrios.

El descentralizar algunos de los actos infantiles fue una de las principales novedades que Txapartegi destacó cuando presentó junto al alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, el programa la semana pasada, el primero que ha diseñado en exclusiva el Gobierno de Bildu.

Siete barrios alejados del centro contarán con un espacio infantil

“Siete barrios contarán con un espacio propio para los niños, hinchables y zonas lúdicas para que puedan disfrutar en su propio entorno”, puntualiza la concejal, desplazando así algunas de las actividades a Altza, Egía o Amara Nuevo.

En algunos casos, la participación se ha concretado, recuerda la concejal, en la cesión de un espacio a algunas asociaciones, y como ejemplo del éxito de la iniciativa del Ayuntamiento subraya que este año se han recibido el doble de solicitudes para instalar una txosna en la zona de Sagüés.

La avalancha llegó después de que el consistorio recordara a todas las asociaciones ciudadanas que constan en su registro que tenían la posibilidad, si estaban interesadas, de contar con un espacio propio en la Semana Grande.

“La aceptación ha sido buena, hay ganas, es un reto que hemos hecho nuestro”, aclara Txapartegi, pero, una vez iniciado el camino, cuál es su fin. Una vez concluida la Semana Grande y ya empezado el próximo curso político, el Ayuntamiento convocará otra reunión, será a modo de balance y para comenzar a perfilar las próximas fiestas.

San Sebastián tiene claro que no se trata de imitar o mirarse en el espejo de Bilbao o Vitoria, si no crear el propio. “No se pueden comparar, cada pueblo y cada ciudad tiene su modo de ser, de vivir las fiestas y es de ahí de donde tenemos que partir”, reflexiona la concejal para volver a insistir en que “lo más importante es tener en cuenta la participación, el dar opción”.

El número de peticiones para instalar una ‘txosna’ se ha duplicado

“Las 351 actividades dan para mucho, cada persona puede encontrar algo de su gusto, habrá actos que sean para contemplar y otros para implicarte, y cuando hablamos de participación, no vamos por ahí”, aclara la concejal, en referencia al tópico de que las fiestas de San Sebastián son más aburridas, o al menos más sosas que las de las otras dos capitales vascas. “Se trata de entrecruzar actos de diversa tipología, ahora también existe la opción de la participación, y, por lo tanto, quien haya querido aportar algo ha tenido la opción, cada uno en esta Semana Grande se puede sentir protagonista a su manera”, remarca la concejal de cultura.

Txapartegi pone como ejemplo las actividades propuestas por los piratas. Cómo, hace 10 años, por su cuenta, comenzaron a proponer sus propios actos hasta ir calando y hacerse un hueco en la Semana Grande donostiarra. “Hay una implicación y entonces las cosas funcionan”, remarca Txpartegi, que se muestra confiada en que los encuentros de trabajo con los diversos colectivos y asociaciones irán poco a poco marcando el ritmo, “serán ellos los que nos dirán hasta donde quieren llegar”.