Avanza la digitalización de la luz

“Unas 12.000 viviendas ya han recibido sus facturas con todos los datos que aportan los nuevos contadores digitales”. José María Grijalba, responsable de Iberdrola Distribución, quiso ilustrar así el grado de desarrollo del plan Bidelek Sareak para modernizar las redes eléctricas de Bilbao y Portugalete. Se trata de un proyecto de colaboración público-privada entre el Gobierno vasco —a través del Ente Vasco de la Energía (EVE)— e Iberdrola. La experiencia alcanzada cuando concluya este programa, en 2014, facilitará extender la tecnología al resto del País Vasco. Porque no hay que olvidar que las eléctricas tienen la obligación legal de renovar todas sus redes para 2018.

Grijalba compareció ayer en Bilbao junto a José Ignacio Hormaeche, director general del EVE, para explicar los avances alcanzados en los primeros seis meses de trabajo de campo. Desde principios de año se han sustituido algo más de 30.000 contadores analógicos por otros digitales en esas dos ciudades, de los 105.000 que está previsto reemplazar durante 2012. Grijalba explicó el porqué de esta modesta cifra: “Las novedades siempre hacen que los comienzos sean más difíciles, pero ya hemos alcanzado una velocidad de crucero”. También se han modernizado, incorporando tecnología que Grijalba califica de “puntera”, 138 centros de transformación eléctrica.

Sin embargo, el programa Bidelek Sareak no habrá culminado hasta que se hayan sustituido todos los contadores (230.000) y centros de transformación (1.110) de Bilbao y Portugalete, lo que, si todo va según lo previsto, ocurrirá en 2014.

Todavía no hay fecha para extender el programa el resto de Euskadi

Además, ambos comparecientes indicaron que también se actuará en el ámbito rural. Así, se renovarán dos subestaciones eléctricas en la zona de Lea-Artibai y se construirá una tercera con el mismo nivel tecnológico.

Hasta el momento se han invertido 5,5 millones de los 60 en los que está presupuestado el plan, y que serán aportados a partes casi iguales por Iberdrola (54%) y el Departamento de Industria (46%).

Grijalba señaló que estos nuevos contadores y centros de transformación permitirán recoger información sobre el consumo, el estado de las redes, e incluso, dotar a los primeros de una inteligencia remota que permita actuar sobre ellos a distancia.

El precio que se paga por el alquiler de los contadores varía con los nuevos

Aunque los consumidores no tendrán que pagar los nuevos equipos en sí, el directivo de la eléctrica admitió que el precio que se cobra por alquilar los contadores —que viene incluido en la factura mensual— sufrirá variaciones. Así, quienes tengan instalados contadores monofásicos —los más antiguos— tendrán que pagar 27 céntimos de euro más cada mes (el alquiler subirá de 0,54 a 0,81 euros) mientras que los que tengan aparatos trifásicos se ahorrarán 36 céntimos (de 1,51 a 1,15 euros al mes).

El director general del EVE, por su parte, recordó que el objetivo, además de mejorar la infraestructura para incrementar la calidad del servicio y ganar en eficiencia energética, es que el proyecto sirva de tractor para el desarrollo tecnológico en Euskadi. Hormaeche apuntó que muchas de las empresas que trabajan en Bidelek Sareak son vascas, y que desarrollar equipos y sistemas “de nivel tecnológico puntero” impulsará la apuesta de estas firmas por la innovación.

El responsable de Iberdrola Distribución apoyó esta tesis y añadió que el propio desarrollo del plan ha destapado problemas que no estaban previstos y ha provocado la necesidad de seguir innovando. “A medida que avanzamos van surgiendo ideas”.

Aunque el plan de modernización y digitalización del sistema eléctrico vasco está en marcha y ha adquirido “velocidad de crucero”, aún no hay fecha para su extensión a otras zonas que no sean Bilbao y Portugalete. Tampoco se ha presupuestado el montante total de esta adaptación.

En cualquier caso, por imperativo legal, la conversión y actualización de la red eléctrica vasca deberán estar listas antes de 2018.