Desmantelada una red de falsificación de tarjetas que se camuflaba en los cajeros

Un trastero de la capital era el lugar que había elegido una organización dedicada a la falsificación de tarjetas para instalar su base de operaciones. Siete detenidos y 25 aparatos de skimming (clonación) es el resultado de la operación realizada por la policía, y que ha permitido recuperar decenas de tarjetas falsificadas listas para su utilización.

La organización mandaba los aparatos para la copia de las tarjetas desde Bulgaria y aquí la organización los camuflaba en los cajeros automáticos de tal forma que los clientes no se percataban en ningún momento de que les estaban copiando los datos. Una vez que habían conseguido la información, la volcaban a una base de datos con la que fabricaban tarjetas nuevas. Con ellas hacían pequeños reintegros en España hasta que el cliente se daba cuenta de que le habían duplicado la tarjeta. En otras ocasiones, mandaban los datos a México, donde también duplicaban las tarjetas y allí adquirían productos de lujo que vendían en el mercado negro.

Las investigaciones de las comisarías de Policía Judicial y Policía Científica comenzaron en abril al comprobar que había un aumento de las falsificaciones de tarjetas en la capital. Los policías lograron controlar un paquete procedente de Bulgaria en cuyo interior iba un aparato de skimming. Los agentes le siguieron la pista hasta que fue recogido por un integrante de la organización. A partir de ahí, le siguieron hasta que identificaron a todos los componentes de la banda.

Los agentes detuvieron a algunos de ellos in fraganti cuando estaban colocando los dispositivos de copia. El registro del trastero y de una vivienda de la organización ha permitido recuperar también abundante material informático, que está siendo analizado por la policía.