Nueva protesta ante la sede del PP en Valencia por los recortes

"¡La gallina ha dicho que no!", rezaba una pancarta esta tarde frente a la sede del PP en Valencia. Allí, unas 300 personas se han congregado de nuevo con cacerolas y pitos para protestar contra los recortes anunciados el pasado jueves por el ejecutivo de Mariano Rajoy. "Espabila o revienta", escribía un joven en una cuartilla bajo la mirada de la decena de agentes de Policía que custodiaba el edificio.

"Hay que venir porque estamos pagando una crisis que no hemos provocado nosotros", se quejaba Pep Benlloch, un profesor universitario de 62 años. "No estoy de acuerdo con la dependencia, ni con la reforma fiscal, ni con los recortes en educación y sanidad... Hay tantas cosas que no sé por dónde empezar", afirmaba. A su lado, Mira Bernabéu, un artista que traía a sus dos hijos de tres años, exponía que su apoyo estaba con los funcionarios: "Porque ellos están soportando el peso de una situación que no han creado y porque de ellos depende el futuro de nuestros hijos", decía señalando a los niños.

Durante las dos horas que ha durado la protesta, los asistentes han ido apuntando proclamas en la calzada como "Crisis no, estafa" o "Criminales, mediocres". Xavi, un estudiante de 19 años, argumentaba que la excusa era venir para pedir la dimisión de Andrea Fabra tras proferir "Que se jodan" en el congreso, pero que "en realidad", las protestas se corresponden con "la mediocridad que invade a los dirigentes políticos" y la "política errónea" del PP. "Están destruyendo los servicios de sanidad y educación para después presentar un plan que garantice la privatización", explicaba, "como han hecho con El Cabanyal".