El juez absuelve de prevaricación al alcalde de Borriol

El Juzgado de Lo Penal número 3 de Castellón ha absuelto al alcalde de Borriol, Adelino Santamaría (PP), de un presunto delito de prevaricación por el que la fiscalía reclamaba ocho años de inhabilitación. El ministerio público consideraba que el regidor no veló para hacer cumplir un decreto de demolición de una cuadra de caballos que él mismo firmó en 2005. A día de hoy la cuadra sigue en pie.

En la sentencia, el juez afirma que “a pesar de la posible ilegalidad de la construcción, no concurre prueba de cargo suficiente como para concluir de forma indubitada en un proceder por parte del acusado aprovechándose de su situación de poder”. Por ello dicta la libre absolución. El fallo sostiene que no se advierte una “inactividad o pasividad” de la administración municipal, ya que se fueron contestando todas las quejas interpuestas por el vecino que denunció estos hechos.

La cuadra, que se levantó en 2004 después de que una sentencia obligara a derruir una levantada previamente, se construyó en una parcela no urbanizable y sin licencia municipal. El alcalde, tras ser preguntado en el juicio por la razón por la que no se había hecho cumplir el decreto de derribo, se limitó a contestar que el escrito fue redactado por los técnicos de Urbanismo y que él sólo los firmaba. “Si tuviera que leer todos los escritos del Ayuntamiento que firmo no haría otra cosa en todo el día”, declaró.

Por su parte, el fallo también absuelve de los delitos de desobediencia y contra la ordenación del territorio a los vecinos que construyeron la cuadra.