Aymerich dice que muchos escindidos están volviendo al BNG

Cuando, el pasado mes de marzo, la corriente interna del BNG Máis Galiza, decidió por muy amplia mayoría abandonar la organización, su cabeza visible, el diputado Carlos Aymerich, no refrendó el acuerdo. Tampoco los otros tres parlamentarios que formaban en la oposición al dominio de la Unión do Povo Galego ni los alcaldes más significativos. Ayer, acompañado por nacionalistas históricos como Camilo Nogueira y Xesús Veiga, Aymerich presentó la nueva marca que agrupa a los exmilitantes de Máis Galiza que se quedaron dentro del Bloque, Abrente. Esquerda Democrática Galega. Y, aseguró, el nuevo partido ha abierto una vía de regreso a algunos escindidos: “Hay gente que se marchó del BNG en un primer impulso, pero que está volviendo a nosotros porque ve que fuera no consigue cuajar nada y hay indefinición ideológica”.

Frente a esa “indefinición”, Abrente ha elegido como lema Falando claro. “Creemos que es el momento de hablar claro”, señaló el otrora portavoz parlamentario de los nacionalistas, “y de hablar de los problemas de la gente y no de si estamos cómodos o no en una organización. Lo que importan son las alternativas que presentemos”. Además de Nogueira y Veiga, comparecieron al lado de Aymerich la diputada Ana Luísa Bouza y los concejales de Vigo Santiago Domínguez, y de Ribeira Dominga Brión. “Somos nacionalistas y apoyamos el derecho a decidir del pueblo gallego, queremos otra Unión Europea, somos de izquierdas porque el lucro no puede ser el principio organizador de la sociedad”, resumió el ideario de Abrente, “y somos del BNG, porque seguimos pensando que es la casa común del nacionalismo”.

Partido “unitario”

Precisamente la nueva facción tiene entre sus objetivos “trabajar por la recomposición de la unidad de los nacionalistas”. Y, según la opinión de Carlos Aymerich, esta debe darse “dentro del Bloque”. Para ello, la nueva fuerza intentará que incluso los que ya no están en la formación frentista visualicen que “esta es la casa común”. Al igual que en su día Máis Galiza, Abrente defiende la conversión del BNG en “una organización unitaria”. “Pero eso no depende únicamente de nosotros”, añadió.

Con la unidad, adujo, pretende espantar un fantasma: el de que el PP se beneficie electoralmente de la fragmentación del nacionalismo.