General Cable anuncia que despedirá a 166 empleados, el 15% de la plantilla

La dirección del grupo General Cable ha presentado hoy un expediente de regulación de empleo (ERE) para extinguir 166 contratos en las cuatro plantas que la multinacional tiene en Cataluña, ubicadas en Barcelona, Montcada, Abrera y Manlleu. En total, la plantilla del grupo, de matriz catalana, que fabrica cable eléctrico, es de 1.070 personas en Cataluña, por lo que el ERE afecta al 15%. En todo el mundo, el grupo suma 47 fábricas (10 de ellas en España y África) y 11.000 empleados.

A través de comunicados difundidos por los sindicatos CC OO y USOC, los representantes de los trabajadores han rechazado la propuesta planteada por la empresa "por falta de rigor y credibilidad" y porque entienden que "no da garantía de viabilidad futura ni medidas para el asentamiento industrial de la empresa en Cataluña", sino que recorta derechos a los trabajadores para favorecer los intereses del grupo accionarial".

El coordinador de política sindical de la Federación de Industria de CC OO, Andreu Capdevila, ha explicado que la compañía proponía una rebaja salarial del 15% -lo cual la empresa rebaja a un 3,3% recuperable los dos próximos años-, un aumento de la jornada laboral de 48 horas y la supresión de una paga extra que la plantilla cobraba en abril. Los sindicatos rechazaron este plan de ajuste, que llevaban negociado aproximadamente un mes y medio, por lo que la firma ha decidido ahora "tirar por el camino más duro y traumático", que es el despido de parte de la plantilla, según Capdevila.

General Cable justifica la presentación del ERE por la caída de la producción y la falta de competitividad salarial de sus plantas catalanas, aunque CC OO cree que lo único que pretende la firma con esta medida es "mejorar la salud de los accionistas". Un portavoz de la empresa aseguró que la empresa requiere ganar competitividad sobre todo de cara al mercado exterior, para lo que ha propuesto varias medidas a los trabajadores. Entre estas, indicó, está una rebaja salarial del 3,3% este año, que se recuperaría en dos años, un aumento de la jornada laboral de tres días repartidos a lo largo del año y una reducción de plantilla de 38 personas que dejarían la empresa con 45 días por año trabajado. La empresa sostuvo que todavía está abierta a alcanzar un acuerdo con la representación sindical a pesar de la ruptura de las negociaciones.

Los trabajadores han acordado emprender varias acciones de protesta y movilizaciones, la primera de las cuales será una concentración este miércoles a primera hora de la mañana ante la sede central de la empresa en Barcelona. Por la tarde, los trabajadores se sumarán a la manifestación convocada en Barcelona contra los recortes. Esta protesta, que también se realizará en Tarragona, Lleida y Girona, se enmarca en una convocatoria de carácter estatal promovida por los sindicatos CC OO y UGT.