_
_
_
_

El juez ordena más diligencias sobre el fuego de As Fragas

El instructor rechaza el archivo de la causa propuesto por el fiscal

Zona dañada por el fuego en As Fragas do Eume, el pasado abril.
Zona dañada por el fuego en As Fragas do Eume, el pasado abril. GABRIEL TIZÓN

La investigación para dar con la primera chispa que prendió fuego al parque natural de As Fragas do Eume está lejos de concluir. El juez instructor, Alejandro Morán, ha ordenado a los agentes de la Guardia Civil que practiquen nuevas diligencias en busca de más pruebas y descarta, por ahora, archivar el caso tal y como propuso el fiscal de medio ambiente, Álvaro García Ortiz, en una entrevista a Europa Press el pasado domingo. El fiscal se escudaba en la dificultad de identificar a la persona que supuestamente arrojó al suelo una colilla en Pena do Crego (A Capela) que en pocas horas se convirtió en una cortina de fuego que arrasó las dos laderas del cañón del río Eume. “Lo lógico cuando hay un delito sin autor o un no delito” sería cerrar el caso, expuso Ortiz.

 Fuentes del caso señalan que detrás del fuego estuvo la mano de una persona, con intención o por descuido, y opinan que todavía hay cierto margen de maniobra para dar con el autor. Las llamas alcanzaron, sin consumirlo, el corazón de la fraga atlántica más valiosa de Galicia y carbonizaron 750 hectáreas del 31 de marzo al 4 de abril. Para el Seprona ha quedado probado que el fuego tuvo un foco único, y no tres simultáneos como sostuvo la Xunta, que se apresuró en culpar a una mano negra y atajar así las críticas al recorte de medios en plena sequía.

La Guardia Civil manejó desde el principio la hipótesis del cigarrillo y ha ido descartando otras hasta dejarla como la más plausible. Sin embargo, fuentes próximas a la investigación aseguran que el informe no ha concluido y que únicamente se ha remitido una primera parte a la fiscalía. El Seprona sobrevoló la zona en helicóptero, rastreó las comunicaciones y peinó el suelo hasta dar con el kilometro cero del fuego. Lo describen como un “círculo blanquecino y arenoso” desprovisto de vegetación debajo de una mata de tojos a solo un metro de una ruta de senderismo en una vaguada de difícil acceso. La combustión fue tan intensa que el fuego quemó la tierra hasta tropezar con una capa de arena.

El informe, al que ha tenido acceso este diario, reproduce detalladamente la secuencia de llamadas al 112 para advertir de un fuego que se avistó a las 10.30, se comunicó a las 11.48 y se declaró oficialmente a las 15.16. Tres personas vieron una columna de humo desde un repetidor de telefonía en el monte Fontardión y dos ciclistas llamaron al 112 a las 11.48. Diez minutos después, los tres primeros testigos también telefonearon al ver que el humo iba a más y afectaba a unos 20 metros cuadrados. La operadora les contestó que la central de incendios ya estaba al corriente. Todavía hubo otras dos llamadas a las 15.11 y a las 15.13 El mismo día, según el Seprona, se contabilizaron otros tres incendios en el mismo municipio. Un error en las comunicaciones del 112 retrasó tres horas la interverción, posiblemente, por una confusión en la localización. Mientras, el fuego siguió latiendo y eclosionó a primera hora de la tarde en un frente imparable. A partir de ahí, el viento y la sequía propiciaron el desastre ambiental.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_