Barcelona revisará sus 15.000 pasos de peatones

Los 15.148 pasos de peatones que hay en las calles de Barcelona pasarán una inspección “exhaustiva” para establecer sus condiciones de seguridad para el viandante. El alcalde Xavier Trias (CiU) explicó ayer el plan que en este sentido desarrollará la Guardia Urbana durante el resto del mandato para que la capital catalana sea “una ciudad que respete y haga respetar a sus peatones”. Casi el 32% de los trayectos diarios en la ciudad se cubren a pie, unos 2,5 millones.

Las estadísticas de siniestralidad dejan muy mal parados a los usuarios de la moto y a los que caminan. Los peatones representan el 30% de los accidentados, según las cifras de la policía local. En los cinco primeros meses de 2012 fallecieron 10 viandantes, el doble que en el mismo periodo del año pasado. Esta tendencia ha reforzado la necesidad de “proteger al más débil en la calle”, según palabras de Evelio Vázquez, el jefe de la Guardia Urbana. Estos mismos informes apuntan a que en el 22,4% de los casos las víctimas son personas de más de 70 años, por lo cual se realizará campaña informativa específica para las personas mayores. El año pasado se produjeron en total 1.179 atropellamientos, y en lo que va de 2012, 492.

“Tenemos que buscar cambiar la mentalidad, los accidentes con peatones usualmente suceden por negligencias pequeñas”, explicó Vázquez. El alcalde, por su parte, hizo un llamamiento a seguir las normas de tráfico por parte de peatones y conductores. “Creo que en esta ciudad se presta poca atención a los pasos de peatones”, puntualizó Trias. El jefe de la Guardia Urbana dijo que hay “órdenes expresas de ser inflexibles para hacer respetar la preferencia que tienen los peatones para cruzar las calles”. Esta infracción tiene una multa de 200 euros.

Dentro del plan presentado ayer, las unidades territoriales de la Guardia Urbana inspeccionarán todos los pasos de cebra que hay en la ciudad —8.185 de ellos sin semáforos— y en ellos se verificarán aspectos como la iluminación, que estén bien pintados y que no haya objetos que impidan la visibilidad. La inversión destinada para la mejora no está clara, pues depende del resultado del diagnóstico.

Trias también explicó que se pondrá especial cuidado en que se cumpla la restricción de velocidad en las llamadas zonas 30. La verificación se hará a través de radares móviles. En lo que va de año, aseguró Vázquez, se han presentado 6.268 denuncias por sobrepasar la velocidad en los lugares con tráfico pacificado.

Por otra parte, el alcalde aseguró que no se plantea la expulsión de la bicicleta de todas las aceras, sino de “algunas”, y puso el ejemplo del Portal de l’Àngel, la Rambla de Catalunya y la Diagonal. En una charla en la Universidad Pompeu Fabra, en mayo pasado, el alcalde dio a entender que la ordenanza que el Consistorio preparaba incluiría dicho veto.