Pitada de los trabajadores del Summa 112 frente a Sanidad

Los trabajadores del servicio de emergencia de la Comunidad de Madrid están hoy en huelga. Pero precisamente por eso, por dedicarse a atender urgencias, los servicios mínimos que tienen que cumplir son del 100%. Resultado: solo con una concentración como la de esta mañana podían dar algo de resonancia a su protesta. Un centenar de personas se han manifestado frente a la sede de la Consejería de Sanidad en la calle Sagasta de la capital, donde tiene su oficina el responsable de recursos humanos, Armando Resino.

Entre las muchas consignas coreadas, su nombre también se ha escuchado: "Resino, dimisión". La de hoy es la primera jornada de huelga de las dos convocadas por los trabajadores del Summa; la siguiente será el próximo día 9.

El motivo de las protestas es la aplicación que está haciendo la Consejería de Sanidad del aumento de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas semanales de los empleados públicos. "Yo llego a hacer seis fines de semana seguidos", se quejaba esta mañana una enfermera del Summa que lleva 22 años en el servicio.

"¿Dónde queda mi conciliación familiar?", añadía. Según los trabajadores, el aumento horario ha significado el despido, o no renovación, de entre 80 y 90 contratos eventuales. El trabajo de esas personas lo hacen ahora los empleados de plantilla o los interinos. Uno de ellos, médico, decía esta mañana que con tanta acumulación de jornadas y de horas, se nota más el cansancio: "A veces, al acabar alguna de las guardias noto que ya no estoy como debería".

"Detrás de cada planilla hay familias", se queja la enfermera, que cuenta que pueden elegir turno de vacaciones cada cuatro años. "Este me tocaba, pero me han dicho que no, que las haga en septiembre y punto. Y nos han añadido más horas de las que nos corresponden, todas curiosamente en sábado y domingo", añade. "A los trabajadores que venían de refuerzo en fin de semana los han echado", señala el médico.

La huelga y las protestas del Summa 112 no están organizadas por los sindicatos. Una asamblea en el Colegio de Médicos el pasado 21 de mayo decidió trasladar el malestar que había entre los trabajadores a la calle para dar visibilidad al problema.