La travesía del desierto de Elbendir

Mohamed Elbendir es español de origen sahariano. Llegó a la península en 1997, con 8 años, gracias a uno de los programas de intercambio de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui. Era la primera vez que abandonaba el desierto argelino donde se encuentran los campamentos de refugiados de los saharauis huidos de la invasión marroquí en 1975. Y su nuevo destino fue el municipio vallisoletano de Viana de Cega. Necesitaba una intervención quirúrgica y ahí fue operado a los pocos meses de llegar.

Los médicos le dijeron que tendría que pasar una revisión cada seis meses. La operación y su posterior recuperación fue el pasaporte definitivo para este joven, al que de pequeño le gustaba correr a todas partes. Tanto su familia en los campamentos como los padres que le acogieron en Valladolid acordaron que se quedara en España a vivir. Pronto Elbendir demostró sus dotes con el atletismo. Y en 2009, con 20 años, logró ser campeón de Europa sub 23. Entre 2009 y 2010 obtuvo varios títulos nacionales en las distancias que van de los 3.000 metros a los 10.000.

Precisamente, en las temporadas 2008-2009 y 2009-2010 Elbendir, que se trasladó a la residencia Blume, formó parte del Club Atletismo Popular de Alcobendas. "Me deben 1.700 euros de los premios que obtuve en la primera temporada, 2.000 euros del fijo de la segunda temporada, y 4.000 euros de los premios. En total 7.700 euros", explica este atleta de 23 años, que ahora no puede competir porque tiene una lesión en el talón de Aquiles.

Para que le paguen esta deuda Elbendir acudió el lunes pasado, hace ya una semana, al Ayuntamiento de Alcobendas, que subvenciona al club. Y desde entonces duerme en la plaza, en espera de una solución, que no llega. "Si en una semana no se arregla todo me pondré en huelga de hambre. No quiero hacerlo, porque podría tener consecuencias muy serias para mi carrera de atleta profesional. Porque yo vivo de esto, y no tengo otros ingresos. Por eso es tan importante para mi que me paguen", relata Elbendir junto a su maleta y un colchón, sus únicas posesiones en Alcobendas, su nuevo desierto particular.

En el club niegan la existencia de esta deuda, y aseguran que han ordenado presentar una demanda contra Elbendir: "No vamos a darle más publicidad, y por eso hemos puesto en marcha a nuestro gabinete jurídico para que presente una demanda injurias y difamación. No es cierto lo que dice, y suponemos que hay un trasfondo diferente. Creemos que pueda haber algo detrás relacionado con el Ayuntamiento. Seguro que es una víctima", contesta el presidente del club, Francisco Barroso al insinuar que el deportista podría haber siendo utilizado por terceros para atacar al Consistorio. Este dirigente se remite a las declaraciones hechas al diario As, en las que fuentes cercanas al club aseguraban que el único pago que está pendiente de abonar a Elbendir es de "mil y pico euros". Las mismas fuentes sostienen que Elbendir dejó de atender los entrenamientos, a los que —indicaron— llegaba muy tarde después de haberse acostado a altas horas de la noche en la residencia madrileña Blume, de la que fue expulsado. El deportista precisó que fue él mismo quien decidió marcharse. "Yo estaba muy a gusto con Antonio Serrano, pero la Federación Española me exigió que me entrenara con Manuel Pascua, y cuando estalló la Operación Galgo, con la que no tengo nada que ver, me dijeron que entrenara con (Luis Miguel) Landa", dijo en As.

Elbendir, que asegura haber sido acosado por un integrante del club vinculado al Consistorio, que trató de impedir que accediera a las dependencias municipales para asearse, explica que el alcalde, Vinuesa, le visitó el primer día: "Me dijo que trataría de buscar una solución, pero desde entonces no sé nada de él", relata el atleta al asegurar que su próximo reto será presentarse al campeonato de Europa que se celebrará a en diciembre con la intención de acabar entre los ocho primeros: "Por eso quiero cobrar lo que me deben. Ya no es una cuestión de dinero, sino de orgullo y de honor", explica Elbendir, que da los nombres de varios excompañeros de equipo a los que supuestamente les debe dinero el Alcobendas: Luis González, Miguel García y Marcos Ramos. Este periódico se ha puesto en contacto con este último, Marcos Ramos (21 años), quien dijo que el club le debe también unos 500 o 600 euros: "Hace cuatro temporadas yo era juvenil de segundo año. Yo era un chaval, y no me hacían caso y di el dinero por perdido", relata Ramos.